Iniesta, ‘El mago’ del balón

En el mundo del fútbol existen jugadores con un don, que hacen de este deporte un arte, este es el caso de Andrés Iniesta.

El centrocampista natural de Albacete es sencillamente mágico. Se asemeja a un bailarín con el cuero en sus pies. El ‘8’ del Barcelona parece tener un idilio con el esférico, al que acaricia cada vez que lo golpea con la misma suavidad que una madre mece a su bebé entre sus brazos cada noche antes de dormir.

Iniesta, ’El hombre de nuestras vidas’, aquel que nos hizo vibrar en Johannesburgo ante Holanda en 2010, sigue demostrando partido a partido que para él la práctica del balompié no es una profesión, es un arte.

El ‘mago’ de Fuentealbilla hizo su última gran función en el Wanda Metropolitano ante el Sevilla, y como si quisiera levantar al público de sus asientos en cada acción realizó su mejor truco, provocando que los mediocampistas rivales, jadeantes por el esfuerzo que les suponía perseguir al capitán azulgrana, llegasen un segundo mas tarde que Andrés a cada disputa de balón. El esférico estaba cosido a sus pies, tanto como el escudo del Barça a su pecho ,nadie podía arrebatárselo al hechicero manchego.

La final de la Copa del Rey suponía la última gran representación de Iniesta, que reservó su truco final para los últimos 38 minutos de juego. En ese momento el tiempo se detuvo. Con el exterior de su bota dio un beso envenenado a la pelota, que acarició las redes de la portería defendida por David Soria. Este gol, repleto de talento, hace enloquecer al centrocampista azulgrana, que puso así el broche de oro a su último espectáculo en una final como capitán del Barcelona.