Kévin Gameiro celebrando su gol ante el Real Betis (Fuente: @Laliga)
¡Los ches se acercan a la final! Los pupilos de Marcelino Garcia Toral consiguieron neutralizar un 2-0 adverso en un choque vibrante.
Antes de poner blanco sobre negro lo acaecido en esta 2ª semifinal de la Copa del Rey, que es el tema principal sobre el que versa esta crónica, ‘El Partido de Manu’ ha estimado oportuno recordar a sus lectores que el otro duelo por un puesto en la final de la competición más añeja del balompié español dejó un empate a uno entre Fútbol Club Barcelona y Real Madrid.
Heliópolis, que el fin de semana pasado fue testigo de cómo el Real Betis Balompié se imponía por 1-0 al Club Atlético de Madrid en el Campeonato Nacional de Liga merced a un gol de Sergio Canales, presentó un ambiente espectacular en el graderío para recibir la visita de un Valencia que este fin de semana empataba a dos en el Camp Nou.
El enfrentamiento tuvo un inicio donde la paridad fue la nota predominante. En los compases iniciales, mientras ambos equipos se estudiaban mutuamente, el conjunto verdiblanco se hizo con el control del esférico en la línea medular ante la escuadra valenciana que optó por ejercer una presión adelantada en pro de dificultar que los hombres que dirige Quique Setién pudiesen hilvanar el juego de posesión que les caracteriza.
Marc Barta, que arrastraba molestias musculares se vio obligado a abandonar el terreno de juego en el minuto 10 y dejó su puesto a Javi García.
Los minutos pasaban lenta pero inexorablemente sin que ninguno de los dos combinados consiguiese imponer su ley. Esta situación propició que por momentos el partido resultase algo soporífero para el espectador neutral.
A la media hora de juego llegó una doble ocasión para los visitantes. En el minuto 29 un potente cabezazo de Santi Mina se estrelló en la cruceta y acto seguido Carlos Soler remataba desviado, avisaban los pupilos de Marcelino.
En la recta final del primer periodo el conjunto sevillano comenzó a tener mayor presencia sobre el arco defendido por Jaume Doménech especialmente gracias a un remate de Andrés Guardado que se marchó rozando el poste.
Sin solución de continuidad cuando parecía que se alcanzaría el entretiempo sin sobresaltos se inauguró el tanteador. En el minuto 45 de juego una acción ensayada botada desde la esquina fue aprovechada por Loren para enviar el esférico al fondo de las mallas visitantes merced a un remate de cabeza que sirvió para abrir la lata al firmar el 1-0.
Los 22 protagonistas ganaban el túnel de vestuarios con una mínima renta favorable a los Béticos, todo habría de decidirse en el segundo y definitivo acto a orillas del Guadalquivir.
Tras la reanudación, la contienda dio un giro de 180 grados y la semifinal se convirtió en un intercambio de golpes. Bajo este contexto de partido, poco habitual sobre el verde del Estadio Benito Villamarín, eran los visitantes quienes ofrecían mayor pegada en la parcela ofensiva, sin embargo, no fueron capaces de transformar sus múltiples acercamientos en el tanto de la igualada.
Poco a poco, el transcurso de los minutos dejó entrever que las intenciones verdiblancas pasaban por ejecutar transiciones veloces mientras que su oponente esperaba replegado a montar contragolpes con los que inquietar a Joel Robles.
Corría el minuto 54 cuando Joaquin Sánchez duplicaba la ventaja de los locales al marcar un gol olímpico que tuvo que ser ratificado por el VAR, era el 2-0.
El respetable congregado en el graderío vivía una auténtica fiesta, no en vano, sus jugadores vencían cómodamente en una semifinal copera tras 14 temporadas sin alcanzar esta ronda en la Copa del Rey.
Marcelino Garcia Toral, técnico che, contemplaba atónito cono el duelo se le escapaba sin remedio y decidió agitar la coctelera al dar entrada a futbolistas de carácter ofensivo, caso de Gameiro.
En los últimos veinte minutos de enfrentamiento, con todo perdido, el conjunto que juega sus partidos como local en el Estadio de Mestalla adelantó sus líneas en su incansable búsqueda de anotar un gol en campo contrario que les metiese de lleno en la eliminatoria.
Corría el minuto 71 de juego cuando un centro medido de Gameiro encontró la testa de Cherysev. El centrocampista ruso apareció desde segunda línea para recortar distancias en el marcador electrónico con el 2-1 con más de un un cuarto de hora por delante antes de alcanzar el minuto noventa.
Agonizaba el partido cuando el goleador en clave valencianista estrellaba otro cabezazo en el poste, los ches aún creían en el milagro y éste acabó produciéndose.
Con el tiempo prácticamente cumplido, mientras los béticos saboreaban el triunfo, una nuevo contragolpe de los pupilos de Marcelino sirvió para que un hiperactivo Gameiro ganase por velocidad a Sidney y ajusticiase al cancerbero local por debajo de las piernas cuando el reloj marcaba el minuto 92 en Heliópolis.
Así las cosas, este empate ‘In extremis’ permite al Valencia Club de Fútbol afrontar el choque de vuelta en la Capital del Turia el próximo 28 de febrero con ciertas garantías de plantarse en el partido por el título. Este hito no lo consiguen los valencianos desde hace once años, concretamente en la campaña 2007/2008 cuando se impusieron al Getafe Club de Fútbol en el Estadio Vicente Calderón allá por el 16 de abril de 2008.
Goleadores:
1-0 Loren 45′ ⚽️
2-0 Joaquin 54′ ⚽️
2-1 Cheryshev 70′ ⚽️
2-2 Gameiro 92′ ⚽️
Vídeo:
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El Partido de Manu 
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