
📌 ¡Triunfo ibérico! Las de Mila Martínez se impusieron por 4-0 a la nación cafetera.
Publicidad de Netflix
LAS GUERRERAS DEL K-POP: EL FENÓMENO DE NETFLIX LLEGA A LOS CINES
los cines este Halloween en su versión sing-along (versión original con subtítulos en español), y los fans podrán disfrutar de un evento único que tendrá lugar del próximo 31 de octubre al 2 de noviembre en cines de toda España.
Desde su estreno el pasado 20 de junio, la película de animación original se ha convertido en un auténtico fenómeno global y es ya la película más popular de la historia en Netflix, acumulando la cifra récord de más de 325 millones de visualizaciones. Las guerreras K-Pop continúan, durante su 18ª semana consecutiva, en el Top 10 de películas de habla inglesa de Netflix, convirtiéndose en el título con mayor permanencia en la historia del ranking.
Además, la banda sonora de Las guerreras K-Pop es la primera en tener cuatro canciones simultáneas en el Top 10 del Billboard Hot 100, con su canción “Golden” acumulando 7 semanas consecutivas como número 1 de la lista, convirtiéndose en una de las 10 canciones de películas que más tiempo han liderado este ranking. La banda sonora ha acumulado más de 7 mil millones de reproducciones a nivel mundial y “Golden” se convirtió en la primera canción interpretada por un grupo femenino que se situaba en lo más alto de la lista de éxitos de Billboard en 24 años, desde que en 2001 lo consiguieran por última vez las Destiny ‘s Child.
Las guerreras K-pop es una producción en asociación con Sony Pictures Animation (Spider-Man: Cruzando el multiverso, Los Mitchell contra las máquinas), dirigida por Maggie Kang y Chris Appelhans, con guión de Danya Jimenez, Hannah McMechan, Kang y Appelhans. El reparto de voces incluye a Arden Cho, May Hong, Ji-young Yoo, Ahn Hyo-seop, Yunjin Kim, Joel Kim Booster, Liza Koshy, Daniel Dae Kim, Ken Jeong y Byung Hun Lee.
La previa |

Hay noches que parecen escritas para medir el temple de las campeonas. Noches en las que el fútbol deja de ser un simple juego y se convierte en una prueba de fe, de orgullo, de alma. Esta noche, en el Campo 1 de la Academia de Fútbol Mohammed VI, el balón volverá a rodar para España. Pero no será un partido más. Será el primer paso de una nueva conquista, el inicio del camino hacia la gloria mundial.
El pasado Europeo dejó heridas. Dolió. Fue una de esas competiciones en las que el fútbol, caprichoso e implacable, se olvidó de ser justo. España dominó en cada faceta, en cada estadística, en cada metro del terreno de juego. Pero la fortuna —esa aliada volátil que tantas veces ha cambiado la historia— le dio la espalda. El destino castigó a quien merecía más. La eliminación en fase de grupos fue un golpe seco, una herida profunda para una generación que solo sabe competir mirando al horizonte más alto.
Y sin embargo, de las derrotas nacen las epopeyas. España resurgió. El playoff ante Austria fue el punto de inflexión, el partido que convirtió la decepción en determinación. Con el corazón por delante, con el talento como bandera, la selección selló su billete al Mundial Sub-17 de Marruecos. Aquel triunfo no fue solo una clasificación: fue un grito de orgullo, una promesa de que la Roja nunca se rinde.
El fútbol femenino español no entiende de improvisaciones. Lo que hoy es una realidad se construyó con años de trabajo, con generaciones que abrieron camino y niñas que soñaron con vestir esta camiseta. Cada paso, cada lágrima, cada gol nos ha traído hasta aquí.
España llega a este Mundial con una hoja de servicio impecable: en todas sus participaciones anteriores, ha subido al podio. Oro, plata, bronce… da igual el color. Lo que nunca cambia es la convicción con la que compite. Porque si algo distingue a esta selección es su mentalidad de élite, su forma de mirar el fútbol como un arte y la victoria como consecuencia del esfuerzo.
Bajo la dirección de Mila Martínez, una técnica que combina serenidad y exigencia, el grupo ha recuperado su esencia: intensidad, juego asociativo, presión alta y una fe inquebrantable en su talento. Martínez ha tejido un bloque en el que la juventud no es debilidad, sino energía; donde cada jugadora se siente parte de un plan más grande que ella misma.
debut no podría tener mejor guion. Frente a España estará Colombia, un rival histórico en la categoría, una selección combativa, valiente, de fútbol directo y corazón indomable. Pero la historia sonríe al equipo español: cuatro enfrentamientos, tres victorias y un empate. Jamás la Tricolor ha logrado vencer a la Roja.
El último capítulo se escribió en el Mundial de República Dominicana, también en la fase de grupos. Fue un duelo vibrante, de los que se deciden en los pequeños detalles. España ganó 1-2 gracias a los goles de Amaya García y Iris Ashley, esta última en el minuto 90, en una jugada que todavía late en la memoria colectiva como símbolo de carácter y fe.
Esta vez, el escenario será Marruecos, pero el espíritu es el mismo: luchar hasta el final, creer siempre, honrar la camiseta hasta el último segundo.
El pitido inicial sonará a las 21:00 (hora peninsular). Será el comienzo del nuevo desafío, el debut en un torneo donde los sueños pesan tanto como la responsabilidad. El duelo ante Colombia será el primer paso de un grupo exigente, el Grupo E, que completan República de Corea y Costa de Marfil. Cuatro selecciones, una sola meta: sobrevivir, avanzar, soñar.
El encuentro podrá seguirse en directo por Teledeporte y FIFA+, y promete ser una declaración de intenciones. Porque España no viaja a Marruecos a participar: viaja a conquistar.
En esta plantilla hay talento para escribir páginas doradas. Hay velocidad, inteligencia, y sobre todo, hay identidad. La que nace de un estilo de juego que ha enamorado al mundo: toque, pausa, precisión. Cada jugadora entiende el juego como una danza, como una sinfonía en movimiento.
España juega con el alma, pero también con cabeza. Y lo hace con el legado de generaciones que triunfaron antes: las Alexia, las Aitana, las Salma, las Cata, las Olga. De ellas aprendieron que la victoria no se hereda, se conquista. Que los himnos no se cantan, se sienten. Que el escudo no se lleva en la camiseta, se lleva en el corazón.
Cuando el balón comience a rodar sobre el verde marroquí, cada pase será una declaración, cada recuperación un compromiso, cada gol una promesa al futuro. No hay espacio para el miedo. Solo para la ambición.
Las jugadoras saben que llevan sobre sus hombros no solo el peso de una bandera, sino el orgullo de todo un país que ha aprendido a amar el fútbol femenino, que ha crecido con ellas, que vibra con su energía y su ejemplo.
Esta noche, España volverá a salir a ganar, como siempre. Pero lo hará con una motivación aún mayor: demostrar que las caídas son solo el preludio de los grandes regresos.
El fútbol fue injusto, sí. Pero el fútbol, como la vida, da segundas oportunidades. Esta Copa del Mundo no solo es un torneo: es una revancha poética. Es la ocasión perfecta para escribir un nuevo capítulo de una historia que ya es legendaria.
Y cuando suene el himno, cuando las banderas ondeen y el balón ruede bajo las luces del desierto, el mundo sabrá que España ha vuelto.
Con el corazón ardiente, con la memoria viva, con la mirada fija en la gloria.
Porque nunca se puede dar por vencida a una selección que juega con el alma y sueña con el oro.
Esta noche, comienza otra historia. La Roja sub-17 vuelve a encender el fuego del fútbol español.
El partido al detalle |

🏆 Copa Mundial sub-17 de Marruecos 2025
🔥 España 🇪🇸 🆚 Colombia 🇨🇴 🔥
😍 Matchday 1 | Día de partido
📅 19 de octubre de 2025
⏰ 21:00 horario peninsular
📺 FIFA Plus
🏟️ Football Academy Mohamed VI, Marruecos
En la cálida noche de Rabat, bajo las luces del Campo 1 de la Academia de Fútbol Mohammed VI, el balón volvió a ser poesía. La España sub-17, bicampeona del mundo, saltó al césped con la serenidad de quien sabe que su historia pesa más que cualquier debut, pero con la ilusión intacta de un equipo que no se conforma con el pasado. Al otro lado, Colombia, una selección valiente, en su cuarta participación mundialista, dispuesta a desafiar la lógica y los pronósticos.
Pero el fútbol, cuando se juega con esta precisión, con esta armonía, con esta pasión, no entiende de resistencia. Desde el primer minuto, las de Mila Martínez impusieron su ley. Toques, apoyos, diagonales, presión alta, inteligencia táctica. Un monólogo futbolístico que dejó claro que el trono mundial tiene nombre propio y bandera roja y gualda.
El reloj apenas marcaba el minuto tres cuando Rosalía Domínguez, la joya del Barça, avisó al mundo. Un disparo de falta directo al corazón del área colombiana obligó a la portera Isabella Tejada a intervenir por primera vez. Era solo el preludio de lo que estaba por venir: una Rosalía hiperactiva, generosa en el esfuerzo, creativa en el toque, que se convirtió en la brújula de un equipo que empezaba a respirar dentro del campo rival.
España se instaló en territorio colombiano como un ejército que avanza sin pausa. En el minuto 11, Lua Arufe, incansable, probó con un disparo desde la frontal. Era la antesala del estallido. Cuatro minutos más tarde, una jugada tejida desde la derecha terminó con un balón suelto en el área que Anna Quer cazó con instinto asesino que le sirvió para abrir la lata con el 1–0, era el grito que marcaba el inicio del nuevo viaje de las campeonas.
El tanto no fue solo una ventaja: fue una declaración de principios. “La Roja” no venía a Marruecos a sobrevivir. Venía a dominar, a enseñar fútbol, a construir otra epopeya.
El juego fluía con una naturalidad casi poética. Lua, omnipresente, se movía entre líneas, cambiaba el ritmo, abría espacios imposibles. Rosalía, dueña del mediocampo, lanzaba diagonales milimétricas. Carolina Ferrera, desde la derecha, era una tormenta constante. Y mientras tanto, Colombia apenas podía contener el aluvión, refugiándose en la heroicidad de su portera Tejada, que multiplicaba las manos y el coraje para evitar la goleada.
En el minuto 21, Rosalía tuvo otra clarísima. Su disparo desde dentro del área parecía tener destino de red, pero Tejada, en modo milagro, lo detuvo. Sin embargo, la resistencia tenía fecha de caducidad.
En el 27’, España volvió a golpear. Carolina centró con dulzura, Carlota Chacón, de la Real Sociedad, giró sobre sí misma y, con un golpeo de rosca exquisito, firmó el 2–0. Una obra de arte. Una definición que recordó por momentos al toque de las grandes maestras. La grada vibró. Marruecos entero se rindió ante la sinfonía española.
El asedio no cesó. Julia Torres lo intentó desde la media distancia, el balón rozó el larguero. España sumaba quince remates en apenas media hora. Colombia, ninguno. La diferencia era abismal. Las europeas manejaban el tiempo, el ritmo, los espacios. Un ejercicio de madurez impropio de su edad.
Cuando el cronómetro se acercaba al descanso, Lua Arufe volvió a romper por la banda derecha. Velocidad, potencia, precisión. Su centro medido encontró a Carlota Chacón, que esta vez remató de cabeza para el 3–0 en el minuto 45. Doblete para la donostiarra, éxtasis colectivo.
Pero aún hubo más. Antes del descanso, un claro penalti sobre Noa Jiménez dio la oportunidad del cuarto. La propia Noa asumió la responsabilidad, pero Tejada, heroica, detuvo el lanzamiento. El grito de rabia española fue también un aplauso para la valentía rival.
El pitido del descanso sonó como un suspiro. España se iba a vestuarios con un 3-0 que pudo ser escandaloso. El dominio era absoluto. El fútbol, una sinfonía.
La segunda parte comenzó con el mismo hambre. Celia Gómez, recién ingresada, probó de inmediato con un disparo potente. Un minuto después, Anna Quer rozó el cuarto tras una acción individual de esas que levantan al público.
Colombia intentó recomponerse con cambios tácticos. Entraron Shaira e Izabella, buscando cerrar líneas y ganar músculo en el mediocampo. Pero España no aflojó. Las de Mila Martínez presionaban alto, recuperaban tras pérdida en segundos y convertían cada posesión en una oportunidad. Era un ciclón vestido de rojo.
A los 60 minutos, Julia Torres volvió a intentarlo de cabeza tras un córner. Las estadísticas eran apabullantes: 15 remates a 1. En el 65’, Rosalía Domínguez ejecutó una falta directa que rozó la escuadra. España jugaba con la elegancia de las campeonas y la frescura de quien disfruta el presente sin miedo al futuro.
Mila decidió refrescar líneas: María Rius sustituyó a la doble goleadora Chacón entre aplausos. El plan era claro: mantener la intensidad, consolidar sensaciones, dar minutos a todo el bloque.
Y entonces, cuando el partido entraba en su tramo final, llegó el broche dorado. Minuto 78. Falta lateral. Rosalía al balón. Su centro, medido como una caricia, encontró el pie derecho de Silvia Cristóbal, la capitana. La líder, el alma del grupo. Su golpeo cruzado se coló en la portería para el 4–0 definitivo. Un gol con sabor a liderazgo, a jerarquía, a historia.
Los últimos minutos sirvieron para dar entrada a Lidia, Carla y Vera, y aunque Silvia terminó con molestias físicas —dejando a España con diez tras agotar los cambios—, nada empañó la exhibición. Lua todavía tuvo una más, pero su disparo alto fue solo un detalle menor en un recital monumental.
Siete minutos de añadido, pura gestión, puro control. España no solo ganó: convenció, enamoró y volvió a enseñar al mundo cómo se juega este deporte.
El 4-0 coloca a España líder del Grupo E, aprovechando el empate entre Corea del Sur y Costa de Marfil. El próximo reto será ante las asiáticas, pero esta noche no se habla de rivales, sino de una certeza: España ha vuelto a dictar cátedra.
En Rabat, el balón bailó al ritmo de España. Cada pase fue una promesa, cada gol una firma de identidad. El equipo de Mila Martínez no solo jugó para ganar, jugó para recordar al planeta por qué este escudo está hecho de talento, de orgullo y de una pasión que no conoce límites.
La bicampeona del mundo ha vuelto a escena.
Y lo ha hecho con un mensaje claro al resto del torneo: ““Aquí está España.
No venimos a participar.
Venimos a reinar otra vez.”
Con esta goleada a Colombia, que no es baladí, España inicia muy bien su camino en suelo marroquí y suma las 3 primeras unidades en su casillero particular y sabe que su próximo adversario será Corea del Sur.

📋 Ficha técnica |
España Sub- 17: Anna Álvarez, Raquel Zuazo (Carla Casti,81), Silvia Cristobal, Julia Torres, Noa Jiménez, María Carbajal (Vera Molina, 81), Carolina (Celia Gómez, DES), Rosalía, Anna Quer (Lidia, 81’), Carlota Chacón (María Rius, 64’) y Lúa Arufe.
Colombia Sub – 17: Isabella Tejada, Amado, Laura Cano, Sofía García, Cortés (Shaira, DES) Clavijo (Vanesa Puerta, 88), Santa, Daniela Todd (Enao, 60’), Ella Grace, María Ceballos (Izabella, DES) y Baldovino.
Árbitra: Alyssa Pennington (USA) Amonestó con tarjeta amarilla a ó: Ana Clavijo.
Goles |
1-0 Anna Quer 15’ ⚽️
2-0 Carlota Chacón 28’ ⚽️
3-0 Carlota Chacón 45’ ⚽️
4-0 Silvia Cristóbal 78’ ⚽️
Incidencias | Partido correspondiente a la primera jornada de la fase de grupos de la Copa del Mundo sub-17 de Marruecos 2025 entre España y Colombia que se ha disputado en el Estadio Football Academy Mohammed VI (Campo 1) en una superficie de hierba natural.
Vídeo |
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