Autor: Manuel López Fernández

  • La crónica | Valioso empate en Kaiserslautern

    (Fuente: UEFA)

    🟨 Empate sin goles en la ida de la final de la UEFA Women’s Nations League 2025. Alemania fue superior, pero Cata Coll estuvo imperial en la portería española. Todo se decidirá el martes en Madrid.

    La previa|

    (Fuente: “El Partido de Manu”)

    Hubo un día —febrero de 2024, La Cartuja, el cielo abierto sobre Sevilla— en que se rompieron las costuras del fútbol femenino mundial. Aquel día, en su primera edición, las campeonas del mundo levantaron el trofeo de la Nations League frente a Francia, y con él levantaron también un nuevo capítulo de oro para la historia. España tocó el cielo, lo sostuvo, y desde entonces camina sin vértigo. Porque esta generación no se sacia, no se conforma, no deja de superar fronteras. Ganaron entonces. Y hoy, casi un latido después, vuelven a estar aquí, bajo el mismo estandarte y con la misma ambición: el desafío de revalidar un título que solo las mejores son capaces de defender.

    España regresa a una final. Regresa al filo donde se define la grandeza.
    La final ya no es un único día: es un relato a doble página.
    Primera parte hoy, 20:30h, Fritz-Walter-Stadion, Kaiserslautern.
    Segunda parte, 2 de diciembre de 2025, Estadio Metropolitano, Madrid.
    Solo entonces —y solo allí— el título será definitivo.
    Hoy apenas se levanta el telón de un título que se decide en el Metropolitano.

    En territorio alemán aguarda un coloso dormido, herido por los nueve años sin coronas y por las semifinales de la EURO Suiza 2025, donde Aitana Bonmatí clavó un gol en la prórroga que reescribió los libros y giró el peso de la historia hacia el bando español. Alemania, reina absoluta durante dos décadas, interrumpida, cuestionada, orgullosa, exige respeto.
    Y lo tendrá.
    Sonia Bermúdez lo advirtió con la claridad de quien respira fútbol: “
    “Nos va a exigir muchísimo. Uno de los partidos más grandes que se pueden jugar ahora mismo. Se decidirá por detalles”.
    La seleccionadora sabe que esta batalla no termina hoy.
    Sabe que Madrid espera —que la vuelta será un rugido.
    Y aun así, quiere ganar ya.
    Porque cada detalle cuenta.
    Porque cada golpe marca el camino.
    Y desea algo más: que el Metropolitano reviente. Que 70.000 almas ardan para el cierre. Que España regrese con ventaja para culminar el título en casa. Ese es el sueño. Ese es el plan.
    Alemania llega invicta a esta final a doble partido contra España. Se deshizo en semifinales de Franciadespués de una primera fase en la que lideró un grupo con Países Bajos, Austria y Escocia, saldada con 5 victorias y un empate antes las neerlandesas. Españatambién obtuvo 5 victorias en su grupo con Inglaterra, Bélgica y Portugal pero cayó con las británicas en su visita a Wembley.

    España llega convertida en un fenómeno competitivo sin precedentes: dos finales en 124 días, tres finales internacionales desde 2023, un Mundial ganado, y la sensación —real, palpable, histórica— de que viviríamos cien años y no volveríamos a ver algo así.
    Olga Carmona lo resumió con la naturalidad de quien ya ha escrito un gol eterno:
    “Sabéis nuestra ambición. Mañana queremos ganar y si Dios quiere, levantar la copa allí”.
    Esta es también la final del relevo y de la valentía.
    Sonia Bermúdez, campeona con la Sub-19 en 2023 y 2024, afronta su primer título como seleccionadora absoluta. Y no lo hace con miedo: lo hace con convicción.
    Convocó a Edna Imade, ocho goles en Liga F, debutante, imparables sensaciones. Convocó a Clara Serrajordi, talento puro del Barça que ocupa el hueco que deja Patri Guijarro, lesionada. No estarán tampoco Salma Paralluelo, ni su desborde rompepartidos, pero sí Athenea del Castillo, sí Leila Ouahabi, sí carácter, sí sangre caliente. Sangre de final.

    La Mannschaft llega incompleta pero jamás inofensiva. Sin Lena Oberdorf —rotura de cruzado— pierde equilibrio. Sin Lea Schüller por motivos personales, Christian Wück reajusta su tablero en un acto final contrarreloj. Pero Alemania nunca se apaga: entra Lina Dallmann, sube el pulso, y sobre todo se mantiene vigente Klara Bühl, fútbol total.
    4 goles, 10 asistencias en Bundesliga.
    3 goles, 3 asistencias camino a la final.
    Es la amenaza.
    La pieza a desactivar.
    El grito de alerta para la defensa española.
    Porque Alemania recuerda su bronce olímpico frente a España en París 2024. Porque ganó por un penalti de Giulia Gwinn, porque duele todavía. Porque quiere revancha y quiere volver a reinar.
    Alemania, 22 años de dominio, 6 Eurocopas consecutivas, 8 en total.
    España, revolución reciente, Mundial 2023, puerta de acero destrozada.
    Un siglo de tradición contra una historia que apenas comienza y ya arde.
    En Madrid —y solo en Madrid— se escribirá el final.
    Allí, en el Metropolitano, que una vez llevó 60.739 personas a un Atleti–Barça inolvidable, la Selección jugará su primer partido en ese escenario monumental. La última palabra, el último pase, el último aliento de esta final ocurrirá en España. Y si las de Bermúdez lo firman, será el tercer título de su historia.

    Pero para llegar al día de la verdad,
    hay que sobrevivir a esta primera noche.
    España vuelve a empezar donde ya fue campeona.
    A un paso del destino, con una final que no termina hoy.
    Porque esta es solo la primera página del último capítulo.
    El 2 de diciembre de 2025 —Madrid— decidirá quién levanta la copa.
    Pero esta noche, en Kaiserlautern, se escribe el prólogo del triunfo o de la batalla más dolorosa.
    La historia vuelve a rodar.
    La pelota vuelve a mandar.
    “La Roja” vuelve a reinar o a resistir.
    hay un sólo rincón donde no se viva y se sienta la pasión por España, por esta familia de futbolistas que sigue haciendo historia y demostrando que no hay retos imposibles con su tesón, su esfuerzo, su trabajo y su calidad profesional y también humana. Esta última la han mostrado hoy cinco de sus integrantes con decenas de aficionados que se han acercado hasta su hotel de concentración en Viernheim para compartir con ellas un ratito de conversación, fotografías, firmas y sobre todo muchísima emoción.

    Entre los fans del equipo nacional aquí en Alemania se han dado cita niños y niñas hijos de familias de oficiales del Ejército del Aire y del Espacio de España destacados en una base aérea de Rammstein. Al mando del Coronel José Enrique Hernández Medel, hoy la misión ha sido bien distinta: conseguir el autógrafo de su jugadora favorita e intercambiar consejos, risas y anécdotas.
    A pesar de la mañana gris, fría y lluviosa con la que se ha despertado la Selección en territorio alemán, Irene, Leila, Clara, Adriana y Athenea han recibido el calor de estos seguidores para transmitírselo a todo el equipo antes del importante partido de esta noche: la ida de la final de la UEFA Women’s Nations League. No es una cita cualquiera y tampoco ha sido un meet&greet cualquiera porque los aficionados lo sabían y han estado a la altura en los ánimos y el aliento ofrecido a las campeonas del Mundo, de la Nations League, subcampeonas de Europa y número 1 del ranking FIFA.
    El primer episodio comienza ahora.
    El final espera en casa, en definitiva, todo empieza en germania, pero escribirá su último capítulo, quizás el más importante, en el Metropolitano.

    El duelo al detalle |

    (Fuente: “El Partido de Manu”)

    🔜 𝙉𝙀𝙓𝙏 𝙂𝘼𝙈𝙀

    🏆 UEFA Women’s Nations League 2025

    🔥 Alemania 🇩🇪 🆚 España 🇪🇸 🔥

    📅 Viernes, 28 de noviembre de 2025

    ⏰ 20:30 horario peninsular

    ✨ La final ✨

    ❤️ Matchday 1 | Día de partido

    📺 La 1 de RTVE

    🏟️ Fritz-Walter Stadion, Kaiserslautern

    Los onces |

    La Selección Española empató ante Alemania (0-0) en la ida de la final de la Nations League. Cata Coll fue salvadora bajo palos, e Irene Paredes evitó un gol en la línea. Edna Imade debutó con la Roja. El martes 2 de diciembre a las 18:30h, las de Sonia Bermúdez se jugarán el título en el Metropolitano

    La noche en la que el fútbol se jugó al borde del colapso, con la lluvia como banda sonora y el miedo como marcador invisible. Alemania rugió, golpeó, perdonó. España resistió. España respiró. España sigue viva.

    Había algo en el gesto de Christian Wück antes de que rodara el balón. Algo de determinación militar, de plan trazado con regla y escuadra. Alemania no salió a probar, salió a imponer. El guion era claro: posesión dominante, presión alta, abismo constante al primer error rival. Y España —acostumbrada al toque y la pausa, a la seguridad de la pelota como abrigo— sintió, desde el segundo uno, que el terreno era enemigo.

    Las transiciones alemanas fueron cuchillas. Klara Bühl, eléctrica y feroz, corría como si el área rival fuese un destino inevitable. Nicole Anyomi era viento huracanado desde el perfil contrario. Ambas convirtieron las bandas españolas en un campo minado. Cada conducción llevaba olor a gol; cada centro era un pequeño terremoto. Irene Paredes y Cata Coll jugaban al límite, multiplicándose, cerrando huecos que se abrían como grietas bajo la lluvia. Hubo una acción —una sola, decisiva— en la que Cata se lanzó como quien salva una patria entera. Alemania mordía. España sufría. Y aún así seguía 0-0.

    La Selección Española se vio desbordada, desconectada, incómoda. Las pérdidas en zona de riesgo dolían, lentas como un castigo. La salida limpia parecía utopía. Ona Batlle vivió un primer acto de supervivencia pura: metros y metros repitiendo el mismo combate, como en un bucle de tormenta. España apenas podía juntar pases; Alemania era un tren sin frenos.

    Árbitra principal: Iuliana Demetrescu. Amonestó a Jule Brand por parte de Alemania, y a Laia Aleixandri por España.

    Y entonces, casi sin querer, la memoria trajo un retazo de dolor antiguo. Japón 2023. Aquel 4-0 que dejó cicatrices. Por primera vez desde aquella noche, España se sintió pequeña. Se sintió mortal. Y lo mejor del marcador no era la igualdad… era que seguía virgen.

    Las 22 futbolistas se marcharon al vestuario con un silencio que sonaba a sentencia aplazada. 45 minutos jugados. El partido aún intacto. Pero la sensación era inequívoca: Alemania estaba por encima. Y España, simplemente, aguantaba.

    Algo cambió tras el descanso. La España que salió del vestuario tenía otra mirada. Más fija. Más firme. Más valiente. Empezaron a aparecer los pases filtrados, los apoyos entre líneas, los movimientos coordinados. Alexia Putellas reclamó la pelota como quien reclama su corona. Esther González olió el área, buscó a las centrales, ganó duelos.

    Primero fue Alexia, con un latigazo seco, rasante, ajustado al palo, que dejó temblando a la afición alemana y helado el aliento del estadio. Poco después, Esther ganó un metro en el aire y estampó un testarazo en el larguero que resonó como un trueno sobre el cielo plomizo. España había cambiado la narrativa.

    Lejos de amedrentarse, Alemania reaccionó como lo hacen los grandes animales cuando los tocas en el orgullo: se retorció, enseñó los dientes y lanzó dentelladas al corazón del partido.

    Anyomi, en una transición vertiginosa, se plantó ante las centrales españolas, pero Paredes y Laia Codina —imperiales— la encerraron como si fuera un ave que entra en una jaula de acero.

    La tormenta alemana continuó. Bühl botó un córner que surcó el área pequeña sin que nadie lo empujara. Klara, en otra embestida, sacó un derechazo desde la frontal que impactó en el poste con una violencia que retumbó en toda la grada. Luego llegó el turno de Brand, cuyo centro-chut se estrelló en el travesaño como si el cielo decidiera también participar en la épica del encuentro.

    Wück ni Sonia Bermúdez querían mover ficha antes de tiempo. Los dos entrenadores gestionaron los cambios como si fuera una final de 1960, de esas de blanco y negro, de las que tenían partido de vuelta y donde cada sustitución era un acto solemne.

    Sonia introdujo primero a una incisiva Eva Navarro, luego a a la siempre vertical Athenea y a Maite Méndez, y remató la faena dando la alternativa a Imade, que debutó con el doce a la espalda para cumplir el sueño que tantas veces le había quitado el sueño.

    Alemania respondió con músculo, con oficio, con piernas frescas. Más vértigo, más centros, más golpes.

    El campo, pesado por la lluvia, se convirtió en un tablero donde cada jugadora tenía que pensar dos veces y correr tres. El miedo a perder congeló el partido. Cada pase pesaba el doble. Cada pérdida era un abismo. Las ocasiones llegaron a cuentagotas.

    La más clara antes del cierre fue un balón dividido que obligó a Cata Coll a salir del área, a lo Neuer, a cortar el desmarque de Bühl. El rechace cayó en los pies de Martínez, que probó desde la distancia. Su disparo se fue desviado y dio una vida extra a las visitantes.

    Cuando la árbitra marcó el final, el silencio duró un segundo que pareció un siglo. Un respiro colectivo. Una tregua temporal. Nadie —ni en rojo ni en blanco— sabía si había ganado algo o lo había perdido.

    Pero España salió viva. Y a veces, en campo enemigo, sobrevivir es lo mismo que vencer.

    Porque este empate sin goles no habla de debilidad, sino de oficio. De saber sufrir. De remar cuando las piernas pesan, cuando el campo resbala, cuando tu rival es una locomotora histórica que no entiende de descansos.

    España, la campeona de Europa, demostró que también sabe defender su corona desde el barro. Que no solo gana desde la armonía técnica, sino desde el sudor, desde el sacrificio, desde esa épica silenciosa que separa a las selecciones buenas de las naciones eternas.

    Firmó algo más valioso:
    una declaración de que la campeona puede sangrar, sí, pero no cae.

    📋 Ficha técnica |

    Alemania: Ann-Katrin Berger; Giulia Gwinn, Janina Minge, Rebecca Knaak, Franziska Kett; Elisa Senss (Kathrian Hendrich 90+2’), Sjoeke Nusken; Selina Cerci (Alara Sehitler 69’), Jule Brand, Klara Bühl; Nicole Anyomi (Shekiera Martínez 73’).

    España: Cata Coll; Ona Batlle, Irene Paredes, Mapi León (María Méndez 77’), Olga Carmona; Laia Aleixandri, Aitana Bonmatí (Athenea del Castillo 77’), Alexia Putellas; Claudia Pina (Eva Navarro 63’), Esther González (Edna Imade 86’) y Mariona Caldentey.

    Goles: No hubo

    Incidencias | Final de la UEFA Women’s Nations League, partido de ida

    Estadio | Fritz-Walter-Stadion, Kaiserslautern, Alemania sobre una superficie de hierba natural.

    Vídeo |

  • Oficial | Mónica Hickmann es la líder del Madrid Club de Fútbol

    (Fuente: Liga F Moeve)

    ▶️ La Liga F le ha dedicado un reportaje en profundidad a la defensa central brasileña.

    Monica Hickmann, la muralla que marca goles con la serenidad de quien mira a la portera a los ojos y nunca pestañea.
    La central brasileña del Madrid CFF se ha convertido, sin exagerar, en el arma más letal desde los once metros de toda la Liga F Moeve en este inicio de temporada. Cuatro penaltis lanzados, cuatro ejecutados con precisión quirúrgica, cuatro decisiones que han terminado en victoria.

    No hay dudas, no hay temblor, no hay margen para el error. Cuando Monica coloca el balón en el punto blanco, en el estadio se podría escuchar caer un alfiler. Porque todo el mundo —rivales, compañeras, afición— sabe que allí está la futbolista más fiable de la competición desde los once pasos.

    A sus 38 años recién cumplidos (Porto Alegre, 21 de abril de 1987), la zaguera vive un momento dulce, de esos que parecen suspendidos en cámara lenta, como si esta temporada fuese la segunda vida deportiva que merecía. En 711 minutos distribuidos en 11 jornadas —ocho como titular, tres desde el banquillo—, Hickmann no solo ha sido cimiento defensivo, guía, voz de experiencia y garante del equilibrio. Ha sido, sobre todo, goleadora, si una central.

    Porque en la Liga F Moeve ningún penalti se ha repetido tanto esta temporada como la imagen de Monica caminando firme hacia el punto fatídico, con esa tranquilidad casi desconcertante, con esa seguridad que convierte en tensión todo lo que la rodea. Cuatro penaltis. Cuatro viajes al fondo de la red. Siempre al mismo lado. Siempre a la derecha de la portera, como quien repite un ritual aprendido, medido, dominado hasta el detalle.

    Y mientras otras lanzadoras alternan potencia, engaño, colocación, la brasileña ha optado por la fidelidad a un gesto ganador. Un patrón inmutable que no teme ser descifrado porque, aun si la guardameta lo adivina —y todas lo han hecho—, no alcanza. La pelota viaja tensa, ajustada, irrefutable.

    El dato no engaña: cada vez que Hickmann ha marcado, el Madrid CFF ha ganado. Cuatro penaltis, cuatro triunfos, cuatro celebraciones que llevan su firma. Su nombre está ligado directamente a los puntos que mantienen al equipo muy vivo en la clasificación, luchando, compitiendo, mordiendo cada jornada con una fiabilidad que empieza desde atrás… y termina, paradójicamente, con una defensa celebrando goles.

    La brasileña no reina sola en las cifras, pero sí en la perfección. Tras ella aparecen con tres lanzamientos Natalia Ramos (Costa Adeje Tenerife), Érika González (Levante UD) y Edna Imade (Real Sociedad). Solo que hay un matiz incontestable: Hickmann tiene el 100% de acierto, y encima es pichichi del equipo junto a Allegra Poljak (cuatro goles también). Las dos máximas goleadoras del club son defensoras. Una anomalía deportiva. Una maravilla estadística.

    El Madrid CFF, junto a la Real Sociedad, es el equipo que más penaltis ha lanzado esta campaña (cinco), y de esos cinco cuatro son de Monica. El restante lo firmó Ángela Sosa, pero la jerarquía en la pena máxima tiene nombre y apellido: Mónica Hickmann.

    En un fútbol donde el detalle decide, donde un parpadeo puede costar un partido, donde el penalti es casi una moneda al aire, Monica Hickmann juega a otra cosa. Su porcentaje roza la perfección. Su temple es de hierro. Sus pasos hacia el punto fatídico parecen una ceremonia.

    Si la Liga F Moeve tuviese una palabra para describir su arranque de curso, sería ella.
    Si el Madrid CFF necesitara un salvavidas, tendría nombre propio.
    Si el penalti pidiera ejecutora, ya tiene reina.

    Hickmann, la central que convierte once metros en ley, y goles en puntos.

    La futbolista que mira a las porteras a la cara y dispara donde todas saben que va a disparar.
    La que nunca falla, la sostiene y defiende para el elenco afincado en Fuenlabrada.

  • La previa |Alemania vs España

    (Fuente: “El Partido de Manu”)

    ▶️ PRIMERA BATALLA, LA CARTA QUE ABRE UNA FINAL INFINITA.

    Hubo un día —febrero de 2024, La Cartuja, el cielo abierto sobre Sevilla— en que se rompieron las costuras del fútbol femenino mundial. Aquel día, en su primera edición, las campeonas del mundo levantaron el trofeo de la Nations League frente a Francia, y con él levantaron también un nuevo capítulo de oro para la historia. España tocó el cielo, lo sostuvo, y desde entonces camina sin vértigo. Porque esta generación no se sacia, no se conforma, no deja de superar fronteras. Ganaron entonces. Y hoy, casi un latido después, vuelven a estar aquí, bajo el mismo estandarte y con la misma ambición: el desafío de revalidar un título que solo las mejores son capaces de defender.

    España regresa a una final. Regresa al filo donde se define la grandeza.

    La final ya no es un único día: es un relato a doble página.
    Primera parte hoy, 20:30h, Fritz-Walter-Stadion, Kaiserslautern.
    Segunda parte, 2 de diciembre de 2025, Estadio Metropolitano, Madrid.

    Solo entonces —y solo allí— el título será definitivo.
    Hoy apenas se levanta el telón de un título que se decide en el Metropolitano.

    En territorio alemán aguarda un coloso dormido, herido por los nueve años sin coronas y por las semifinales de la EURO Suiza 2025, donde Aitana Bonmatí clavó un gol en la prórroga que reescribió los libros y giró el peso de la historia hacia el bando español. Alemania, reina absoluta durante dos décadas, interrumpida, cuestionada, orgullosa, exige respeto.
    Y lo tendrá.

    Sonia Bermúdez lo advirtió con la claridad de quien respira fútbol: “
    “Nos va a exigir muchísimo. Uno de los partidos más grandes que se pueden jugar ahora mismo. Se decidirá por detalles”.

    La seleccionadora sabe que esta batalla no termina hoy.
    Sabe que Madrid espera —que la vuelta será un rugido.
    Y aun así, quiere ganar ya.
    Porque cada detalle cuenta.
    Porque cada golpe marca el camino.

    Y desea algo más: que el Metropolitano reviente. Que 70.000 almas ardan para el cierre. Que España regrese con ventaja para culminar el título en casa. Ese es el sueño. Ese es el plan.

    Alemania llega invicta a esta final a doble partido contra España. Se deshizo en semifinales de Franciadespués de una primera fase en la que lideró un grupo con Países Bajos, Austria y Escocia, saldada con 5 victorias y un empate antes las neerlandesas. Españatambién obtuvo 5 victorias en su grupo con Inglaterra, Bélgica y Portugal pero cayó con las británicas en su visita a Wembley.

    España llega convertida en un fenómeno competitivo sin precedentes: dos finales en 124 días, tres finales internacionales desde 2023, un Mundial ganado, y la sensación —real, palpable, histórica— de que viviríamos cien años y no volveríamos a ver algo así.

    Olga Carmona lo resumió con la naturalidad de quien ya ha escrito un gol eterno:

    “Sabéis nuestra ambición. Mañana queremos ganar y si Dios quiere, levantar la copa allí”.

    Esta es también la final del relevo y de la valentía.
    Sonia Bermúdez, campeona con la Sub-19 en 2023 y 2024, afronta su primer título como seleccionadora absoluta. Y no lo hace con miedo: lo hace con convicción.

    Convocó a Edna Imade, ocho goles en Liga F, debutante, imparables sensaciones. Convocó a Clara Serrajordi, talento puro del Barça que ocupa el hueco que deja Patri Guijarro, lesionada. No estarán tampoco Salma Paralluelo, ni su desborde rompepartidos, pero sí Athenea del Castillo, sí Leila Ouahabi, sí carácter, sí sangre caliente. Sangre de final.

    La Mannschaft llega incompleta pero jamás inofensiva. Sin Lena Oberdorf —rotura de cruzado— pierde equilibrio. Sin Lea Schüller por motivos personales, Christian Wück reajusta su tablero en un acto final contrarreloj. Pero Alemania nunca se apaga: entra Lina Dallmann, sube el pulso, y sobre todo se mantiene vigente Klara Bühl, fútbol total.

    4 goles, 10 asistencias en Bundesliga.
    3 goles, 3 asistencias camino a la final.

    Es la amenaza.
    La pieza a desactivar.
    El grito de alerta para la defensa española.

    Porque Alemania recuerda su bronce olímpico frente a España en París 2024. Porque ganó por un penalti de Giulia Gwinn, porque duele todavía. Porque quiere revancha y quiere volver a reinar.

    Alemania, 22 años de dominio, 6 Eurocopas consecutivas, 8 en total.
    España, revolución reciente, Mundial 2023, puerta de acero destrozada.
    Un siglo de tradición contra una historia que apenas comienza y ya arde.

    En Madrid —y solo en Madrid— se escribirá el final.
    Allí, en el Metropolitano, que una vez llevó 60.739 personas a un Atleti–Barça inolvidable, la Selección jugará su primer partido en ese escenario monumental. La última palabra, el último pase, el último aliento de esta final ocurrirá en España. Y si las de Bermúdez lo firman, será el tercer título de su historia.

    Pero para llegar al día de la verdad,
    hay que sobrevivir a esta primera noche.

    España vuelve a empezar donde ya fue campeona.
    A un paso del destino, con una final que no termina hoy.
    Porque esta es solo la primera página del último capítulo.

    El 2 de diciembre de 2025 —Madrid— decidirá quién levanta la copa.
    Pero esta noche, en Kaiserlautern, se escribe el prólogo del triunfo o de la batalla más dolorosa.

    La historia vuelve a rodar.
    La pelota vuelve a mandar.
    “La Roja” vuelve a reinar o a resistir.

    hay un sólo rincón donde no se viva y se sienta la pasión por España, por esta familia de futbolistas que sigue haciendo historia y demostrando que no hay retos imposibles con su tesón, su esfuerzo, su trabajo y su calidad profesional y también humana. Esta última la han mostrado hoy cinco de sus integrantes con decenas de aficionados que se han acercado hasta su hotel de concentración en Viernheim para compartir con ellas un ratito de conversación, fotografías, firmas y sobre todo muchísima emoción.

    Entre los fans del equipo nacional aquí en Alemania se han dado cita niños y niñas hijos de familias de oficiales del Ejército del Aire y del Espacio de España destacados en una base aérea de Rammstein. Al mando del Coronel José Enrique Hernández Medel, hoy la misión ha sido bien distinta: conseguir el autógrafo de su jugadora favorita e intercambiar consejos, risas y anécdotas.

    A pesar de la mañana gris, fría y lluviosa con la que se ha despertado la Selección en territorio alemán, Irene, Leila, Clara, Adriana y Athenea han recibido el calor de estos seguidores para transmitírselo a todo el equipo antes del importante partido de esta noche: la ida de la final de la UEFA Women’s Nations League. No es una cita cualquiera y tampoco ha sido un meet&greet cualquiera porque los aficionados lo sabían y han estado a la altura en los ánimos y el aliento ofrecido a las campeonas del Mundo, de la Nations League, subcampeonas de Europa y número 1 del ranking FIFA.

    El primer episodio comienza ahora.
    El final espera en casa, en definitiva, todo empieza en germania, pero escribirá su último capítulo, quizás el más importante, en el Metropolitano.

    🔜 𝙉𝙀𝙓𝙏 𝙂𝘼𝙈𝙀

    🏆 UEFA Women’s Nations League 2025

    🔥 Alemania 🇩🇪 🆚 España 🇪🇸 🔥

    📅 Viernes, 28 de noviembre de 2025

    ⏰ 20:30 horario peninsular

    ✨ La final ✨

    ❤️ Matchday 1 | Día de partido

    📺 La 1 de RTVE

    🏟️ Fritz-Walter Stadion, Kaiserslautern

    (Fuente: “El Partido de Manu”)

  • Oficial | El documental del Tenerife ya se puede ver

    (Fuente: Club Deportivo Tenerife Femenino)

    🚨 La producción de Coco Films que repasa los diez años de historia de la Unión Deportiva Tenerife, desde su fundación en 2013 hasta su consolidación en la élite del fútbol femenino nacional, se incorpora al catálogo de la plataforma de streaming de Amazon, dentro de la suscripción de la misma.

    📰 Las guerreras de Tenerife 📰

    – El documental que convierte la memoria en leyenda y la lucha en un legado eterno

    Hay historias que se cuentan.
    Otras que se recuerdan.
    Y luego existen aquellas capaces de incendiar el alma: las que nacen pequeñas, crecen invisibles, se forjan con sudor y convicción, y un día —sin anunciarlo— se vuelven inmortales.
    La historia del Club Deportivo Tenerife Femenino, antes Unión Deportiva Tenerife Egatesa, pertenece a esta última categoría.

    Hoy, ese camino de resistencia y sueño compartido tiene un nuevo hogar: Prime Video.
    Y con él, un nuevo altavoz para contar al mundo quiénes son Las Guerreras de Tenerife.
    Quiénes fueron.
    Y —sobre todo— quiénes nunca dejarán de ser.

    En cada plano del documental producido por Coco Films y dirigido por Alfonso Llácer Lorca, ocurre algo imposible de ignorar: la emoción se convierte en geografía. Tenerife no es un escenario. Es un personaje más. Es el acento, la raíz, el origen y el destino.

    Este filme recorre desde la fundación en 2013 hasta la consolidación del club en la élite nacional.
    No lo hace con cifras: lo hace con piel.
    Con voz entrecortada.
    Con lágrimas que no piden perdón por caer.

    Se escuchan testimonios que vibran.
    Aparecen imágenes que duelen y curan a la vez.
    Se revive la incertidumbre, el viaje en guagua, el vestuario sin promesas.
    Se escucha el eco de aquellas madrugadas en las que las jugadoras entrenaban después de cumplir jornadas laborales, cuando el sueño parecía demasiado grande para unas manos tan jóvenes.

    Y sin embargo, siguieron.
    Porque quedarse quietas habría sido renunciar a su alma.

    No hubo un camino pavimentado para el CD Tenerife Femenino.
    Hubo tierra.
    Hubo viento.
    Hubo dudas.
    Pero sobre todo hubo carácter.

    El documental revela lo que nunca se cuenta en titulares: las derrotas que construyen, los contratos que nunca llegaron, la fuerza de la afición que alentó incluso cuando apenas eran unas decenas detrás de una valla con banderas hechas a mano.

    Cada jugadora que viste estos colores pertenece a una genealogía espiritual:
    la de quienes no bajan la cabeza.
    la de quienes caen y se levantan más fuertes.
    la de quienes compiten sin olvidar que antes de rivalidad existió amor por la camiseta.

    Este club no solo compitió.
    Persistió.
    Y en la persistencia encontró grandeza.

    El viaje comenzó en la vida real antes que en la pantalla.
    Primero fueron los cines X-Sur, donde el público contuvo la respiración.
    Después la proyección abierta en el Espacio Cultural CajaCanarias, un abrazo multitudinario a una película que no solo se mira: se siente.
    Luego vino Madrid, donde Hospiten y la Casa de Canarias llevaron el escudo más allá del Atlántico, demostrando que Tenerife no tiene fronteras cuando juega a ser eterno.

    Y ahora, Prime Video abre la puerta al resto del planeta.
    Cualquier persona, en cualquier rincón del mundo, podrá conocer la épica de estas futbolistas que se plantaron ante la historia y dijeron:

    Nosotras también merecemos un lugar.
    Nosotras también somos fútbol.
    Nosotras también somos Tenerife.

    En la columna vertebral de esta epopeya hay un nombre inevitable: Don Sergio Batista.
    No se menciona como superior, sino como faro.
    Como el presidente que creyó cuando creer era un acto de locura.
    Como la voz que repetía que Tenerife siempre se levanta, siempre responde, siempre pelea.

    Bajo su dirección, se inculcó una filosofía que este documental inmortaliza: Humildad para avanzar.
    Cercanía para crecer.
    Orgullo para competir.
    Resiliencia para nunca mirar atrás con miedo.

    Esa es la sangre blanquiazul que corre por las venas del equipo insular.

    Este documental ha sido posible gracias al apoyo de la Consejería de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes del Gobierno de Canarias, el Instituto Canario de Igualdad, los Ayuntamientos de El Rosario y Adeje, y numerosas entidades que entendieron que el fútbol femenino no es una moda: es una conquista social en movimiento.

    Las Guerreras de Tenerife no sólo cuentan una historia deportiva — narran una victoria cultural, humana y colectiva.

    Para todos los suscriptores Para todo el que quiera sentir Tenerife en el pecho

    Este documental no se ve, se vive, se respira y se recuerda incluso después de terminar.

    Porque mientras exista una niña con un balón en la playa de Las Teresitas soñando con un debut,
    mientras la grada siga entonando nombres con la voz rota,
    mientras el pueblo de Tenerife siga defendiendo su identidad con orgullo volcánico,
    la historia seguirá escribiéndose.

    Y que nadie lo dude:
    Las guerreras aún no han dicho su última palabra.

    Vídeo |

    https://youtu.be/rdYO_FQVd-o?feature=shared

    (Fuente: Costa Adeje Tenerife Egatesa)

  • Alemania vs España: La final de la Liga de Naciones Femenina que definirá una era

    (Fuente: “El Partido de Manu”)

    🟦 El fútbol femenino europeo alcanza su cima de tensión y emoción: España y Alemania se enfrentan en la final de ida de la Liga de Naciones Femenina, un choque que promete quedar grabado en la historia de la competición. Más que un partido, este duelo es un enfrentamiento de estilos, generaciones y ambiciones. 

    (Fuente: RFEF)

    El fútbol femenino europeo alcanza su punto álgido de emoción y tensión. España y Alemania se enfrentan en la final de ida de la Liga de Naciones Femenina, un duelo que no solo definirá quién da el primer paso hacia el título, sino que servirá para escribir un capítulo dorado en la historia de ambas selecciones. Este enfrentamiento enfrenta a dos estilos, generaciones y ambiciones: la España de la nueva era dorada frente a la Alemania de la experiencia y la tradición.

    La selección española llega a la cita tras una trayectoria espectacular. Desde la histórica Copa del Mundo de Australia y Nueva Zelanda 2023 hasta la consolidación en torneos internacionales, España ha demostrado un estilo de juego reconocible y eficaz: posesión, verticalidad precisa y presión asfixiante.

    Con jugadoras como Alexia Putellas, Aitana Bonmatí y Ona Battle, “La Roja” combina talento individual y trabajo colectivo, generando un fútbol capaz de desafiar cualquier pronóstico.

    Alemania, por su parte, es sinónimo de consistencia y disciplina. La Mannschaft llega con hambre de gloria, consciente de que su legado histórico como potencia del fútbol femenino europeo está en juego. Con veteranas como Dzsenifer Marozsán, Alexandra Popp y Lena Oberdorf, y la irrupción de jóvenes talentos, Alemania combina experiencia y velocidad en ataque, junto a una defensa sólida y organizada que ha sido su sello durante décadas.

    La final promete ser un choque de estilos: España buscará dominar la posesión, triangular en campo contrario y generar superioridades por las bandas, con presión alta para incomodar la salida alemana y provocar errores que puedan convertirse en ocasiones claras. Alemania, en cambio, apostará por compactación defensiva, paciencia y eficacia en el contragolpe, aprovechando cualquier despiste español. La intensidad física y la capacidad de cerrar espacios será determinante para neutralizar la creatividad de las jugadoras españolas.

    Históricamente, Alemania ha dominado la mayoría de los enfrentamientos directos, especialmente en categorías inferiores y en fases finales de Eurocopas. Sin embargo, España ha crecido exponencialmente y llega con la confianza de quien sabe que el futuro es suyo. Este duelo no es solo un partido; es una prueba de evolución: la vieja guardia alemana frente a la España moderna, experimentada y ambiciosa.

    En cuanto a jugadoras clave, España se encomienda a Alexia Putellas, cerebro y corazón del equipo, capaz de cambiar el curso del partido con su visión y precisión; Aitana Bonmatí, equilibrio táctico y creatividad; Fiamma Benítez, el desequilibrio de Jenni Hermoso y Patri Guijarro, pasando por la llegada desde segunda línea de Claudia Pina y la capacidad de Edna Imade en los momentos decisivos.

    Alemania confía en la magia de Dzsenifer Marozsán, la eficacia aérea de Alexandra Popp, el pulmón de Lena Oberdorf y la proyección ofensiva de Giulia Gwinn.

    cuanto a estadísticas recientes, España llega con 6 victorias y 1 empate en sus últimos 7 encuentros de la Liga de Naciones, mientras que Alemania se mantiene invicta en sus últimos 8 partidos, destacando por su solidez defensiva y eficacia ofensiva. Ambos equipos promedian más de 2 goles por encuentro, lo que anticipa un choque intenso y lleno de ocasiones.

    Más allá de la táctica, el factor emocional será crucial. España busca demostrar que su fútbol no solo es prometedor, sino capaz de dominar a cualquier gigante europeo, mientras que Alemania pretende reafirmar que su experiencia y tradición siguen siendo sinónimo de éxito. Cada balón, cada pase y cada disparo tendrán un peso histórico, convirtiendo la ida en un capítulo crucial para la final.

    Se espera un partido de titanes, lleno de intensidad, estrategia y talento individual, donde cada acción puede decidir el rumbo de la eliminatoria.

    La ida servirá para marcar territorio, plantar bandera en la historia de la competición y enviar un mensaje claro: el título no se regala, se lucha hasta el último minuto.

    La grada vibrará, el estadio latirá y ambos equipos pondrán el corazón sobre el césped. España y Alemania, tradición y futuro, garra y talento, cara a cara en busca de la gloria europea. La cuenta atrás ha terminado: el momento es ahora.

    🔜 𝙉𝙀𝙓𝙏 𝙂𝘼𝙈𝙀

    🏆 UEFA Women’s Nations League 2025

    🔥 Alemania 🇩🇪 🆚 España 🇪🇸 🔥

    📅 Viernes, 28 de noviembre de 2025

    ⏰ 20:30 horario peninsular

    ✨ La final ✨

    ❤️ Matchday 1 | Día de partido

    📺 La 1 de RTVE

    🏟️ Fritz-Walter Stadion, Kaiserslautern

    (Fuente: RFEF)
  • Reportaje | A 24 HORAS DE LA GRAN FINAL DE LA LIGA DE NACIONES: ALEMANIA vs ESPAÑA

    (Fuente: UEFA)

    🟣 España está a veinticuatro horas de intentar el golpe definitivo en Alemania. La Liga de Naciones llega a su cima con una final que huele a historia, a vértigo y a destino, y la selección de Sonia Bermúdez aterriza en Kaiserslautern dispuesta a dejar una huella que trascienda al resultado. Con un once casi intocable, con el talento encendido y la ambición afilada, “La Roja” se prepara para desafiar al acero alemán en una ida que puede abrir las puertas del título. Aquí empieza la cuenta atrás del sueño.

    (Fuente: RFEF)

    Kaiserslautern respira fútbol. En cuestión de horas, Alemania y España se mirarán a los ojos bajo una noche fría que promete ser ardiente en intensidad, presión y legado. Una final así no se juega todos los días. Una final así se sueña, se construye, se respira durante semanas, y ahora, a menos de veinticuatro horas para el pitido inicial, el planeta fútbol sabe que algo grande está por suceder.

    España viaja a territorio alemán con un objetivo cristalino: dar el primer golpe en la ida y encaminar un título que encajaría en su vitrina con el brillo de lo histórico. Sonia Bermúdez no especulará. No puede. No se permite. Este es el momento en el que solo cabe la excelencia, el vértigo del talento y la valentía de competir sin red.

    La Selección Española de Fútbol llega con una estructura reconocible, una base que sostiene el juego como una arquitectura segura, firme. Habrá una ausencia notable, sí: Patri Guijarro, lesionada en el escafoides del pie derecho. Un vacío. Pero en fútbol, donde hay un hueco siempre nace una solución, y ahí aparece Laia Aleixandri, como tantas veces, como casi siempre. Polivalente. Fiable. Precisa. Sin ruido, con jerarquía.

    Cata Coll, en la portería, llega con la confianza alta tras un Clásico memorable, con paradas que explican por qué nadie discute su titularidad. Bajo palos manda ella. Tiene reflejos, frialdad, intuición; cualidades que se vuelven esenciales en noches de final, cuando un segundo puede reescribir la historia.

    La defensa no genera debate:Ona Batlle — electricidad de banda, motor inacabable. Olga Carmona — jerarquía y memoria de goles eternos. Mapi León & Irene Paredes (C) — la roca que sostiene, el muro que ordena.

    La medular será templo. Será cerebro. Será mando: Aleixandri, equilibrando.

    Aitana, dictando. Alexia, recordando que el fútbol también se baila.

    Y arriba… el debate. El único. El dulce dilema que sonríe la entrenadora: ¿quién será la nueve?

    Lo lógico —lo que todo apunta— es Esther González. Campeona de la NWSL con Gotham por segundo año consecutivo, goleadora de instinto voraz, recuperada ya de las molestias que le apartaron del último llamado. Aunque llegó un día más tarde por el viaje, todo huele a que será titular.

    A sus costados:Mariona Caldentey, indiscutible. Claudia Pina, en estado poético con el gol.

    La variante aparece solo si la punta se modifica: Vicky López, Alba Redondo, Martín-Prieto… una constelación de alternativas que más que duda, es riqueza.

    Frente a Suecia, en La Rosaleda, la Selección brilló como nunca: ritmo, precisión, asociación. Ese partido no fue victoria: fue exhibición. Bermúdez lo sabe. Y por eso no tocará mucho lo que funciona. Las finales no piden inventos; piden convicción.

    Kaiserslautern huele a acero, y del otro lado espera un gigante que no pestañea. Alemania no concede espacios, no ofrece regalos; hay que arrancárselos. Es una selección que exige paciencia y filo al mismo tiempo, que endurece cada metro del campo.

    Pero España tiene algo que el mundo ya reconoce: fútbol.Y ahora tiene, además, hambre.

    Edna Imade — La sonrisa como arma, la intuición como filo

    Hay jugadoras que se explican con números. Con porcentajes. Con cartografías del movimiento.

    Pero Edna Imade no cabe en una estadística.

    Quien la ha visto entrenar no recuerda primero los goles, sino la atmósfera que nace de ella. Es sonrisa, pero no una sonrisa amable: es una brújula. Una luz que desata calma donde hay tensión, claridad donde hay presión.

    No se entrena eso. No se calcula en datos, solo siente.

    En un vestuario, Edna es un termómetro emocional. Cuando el nervio aprieta, lo afloja. Cuando pesa la responsabilidad, ella la convierte en juego. Hay liderazgo que se grita, pero el suyo se contagia. Silencioso. Profundo. Determinante.

    Y debajo de ese gesto dulce vive una competidora fiera.

    Una delantera que no negocia el esfuerzo y que muerde cada balón dividido. Granada la vio transformarse: de extremo eléctrico a delantera total. De chispa a puñal. De desborde a sentencia.

    Cambiar de rol no es cambiar de posición. Es renacer y Edna lo hizo.

    Ahora España la observa como tesoro. Como posibilidad. Como arma secreta para un partido que exigirá astucia y valentía. Alemania teme lo previsible. Lo controlable. Lo estructurado. Pero ¿cómo marcas lo que es sorpresa?

    ¿Cómo te preparas para una sonrisa que anuncia riesgo?

    Edna es esa grieta en el plan rival.

    Ese desmarque que rompe líneas.

    Esa jugadora que aparece donde no estaba prevista.

    Y si Bermúdez decide soltarla, Alemania tendrá un problema que aún no ha ensayado.

    Olímpico de Kaiserslautern será un volcán.

    España llega con un once casi dibujado, con la ambición limpia, con talento que desborda y una identidad que ya nadie discute. Hay un muro al frente, sí. Pero también hay una puerta. Y a veces basta un gesto para cruzarla.

    Un pase de Alexia se marida con un giro de Aitana.

    Una diagonal de Mariona o un balón que cae en el área y —quién sabe—

    Y tal vez la sonrisa de Edna Imade, convertida en gol.

    Mañana no se juega solo un título. Mañana España se mira al espejo para descubrir quién es.

    Y la historia, que nunca perdona el miedo, quizá recuerde este día como el primero que anunció un nuevo país campeón.

    Estamos a veinticuatro horas. La final late, respira y se acerca.

    España también y lo hace con una mezcla de deber, carácter, ilusión y hambre de títulos.

    A 24 horas del partido de ida de la final de la UEFA Women’s Nations League que España disputa frente a Alemania a las 20:30h en el Fritz-Walter-Stadion, la seleccionadora y la internacional han comparecido ante los medios que se han desplazado hasta tierras germanas para cubrir el partido en Kaiserslautern.

    Sonia Bermúdez analizaba al rival: «Es un rival que nos va a exigir mucho, domina el juego de posición, intentaremos tener el balón mucho y guardarlo«. Es la primera final para la seleccionadora madrileña y llega «con ganas de que llegue mañana. Sabemos que Alemania es un rival durísimo que nunca baja los brazos, es un equipo que no se rinde. Las jugadoras lo saben, nosotros lo sabemos. Es de los mejores partidos que se pueden ver»

    Es una oportunidad única y así se encuentra ante ella: «Estoy feliz, encantada de estar aquí, de tener esta oportunidad con las mejores jugadoras del mundo, estoy encantada y feliz«. El partido de mañana será duro, destacaba Sonia Bermúdez, pero el planteamiento al ser a doble partido es «mejor ir partido a partido, se decidirá por pequeños detalles, y esperaremos al Metropolitano, que nos informan que puede que esté lleno, pero les necesitamos. Firmaría ganar 0-3 pero es difícil e intentaremos ganarlo allí. Hay jugadoras que se merecen todo, nos toca ganar y estaría encantada por estas futbolistas que se lo merecen».

    🏆 UEFA Women’s Nations League 2025

    🔥 Alemania 🇩🇪 🆚 España 🇪🇸 🔥

    📅 Viernes, 28 de noviembre de 2025

    ⏰ 20:30 horario peninsular

    ✨ La final ✨

    ❤️ Matchday 1 | Día de partido

    📺 La 1 de RTVE

    🏟️ Fritz-Walter Stadion, Kaiserslautern

    (Fuente: RFEF)

    Mientras que Olga Carmona hacía referencia a las sensaciones del equipo antes de esta ida de la final: «Hemos analizado a Alemania, todos los partidos, también los que ha jugado contra Francia, estamos con ilusión y ganas«. El recuerdo de las semifinales de la Eurocopa está presente en el equipo «fue uno de los partidos más difíciles por clasificarte para una final, donde te jugabas todo, fue muy difícil y nos costó mucho meter ese gol«. Hablaba la sevillana de la «preparación del equipo, mañana daremos las últimas pinceladas para el primero de los dos partidos, pero lo hemos trabajado mucho«. «Ya sabéis de la ambición de esta selección» y con la intención de ganar llega el combinado nacional a este primer partido. Destacaba además la jugadora del Paris Saint-Germain la «importancia de que la vuelta sea en casa y que queremos, si Dios quiere, levantar la copa allí«. 

  • Reportaje | Edna Imade, la amenaza que Alemania teme

    (Fuente: RFEF)

    🟨 La nueva delantera de “La Roja” es la principal baza ofensiva de España ante el cuadro germano.

    📰 Edna Imade, la delantera que vino del desierto para cambiar la historia de España 📰

    (Fuente: RFEF)

    La epopeya definitiva. Un reportaje de “El Partido de Manu” para leer prisa, para respirar fútbol, para recordar durante años.

    Hay futbolistas cuya sola mención genera respeto con su sola presencia en el césped.

    Hay otras que despiertan miedo. Y luego está Edna Imade, un nombre que Alemania recita con la misma cautela con la que se invoca a una tormenta. La subcampeona de Europa llega a la final de la Nations League con un as bajo el brazo. España no solo lleva botas y maletas a Kaiserslautern y Lleva pólvora, historia y Edna.

    El de Edna Imade es uno de ellos. Su nombre no solo se escucha: resuena. Vibrante. Ascendente. Decisivo. Y en Alemania —bronce olímpico en París 2024, potencia eterna, coloso de acero— el simple hecho de mentarla genera inquietud. No es exageración: es realidad competitiva, es fútbol.

    España, vigente campeona de la Nations League, se encuentra ante un nuevo desafío monumental: la final ante Alemania, la última valla entre las subcampeonas de Europa y un título que podría instalar una dinastía. Pero esta vez algo es distinto. Esta vez existe un factor que reescribe libretos, que rompe análisis previos, que abre posibilidades que antes no estaban sobre la mesa.

    Esa diferencia tiene zancada, tiene acento, tiene historia y tiene destino.

    Se llama Edna, se apellida Imade y viene para quedarse y golear, tomen nota.

    Para entender por qué España sueña con ella, primero hay que entender lo que hizo en Granada. No fueron números decorativos, fueron números tallados en mármol.

    Pero donde la mirada se detuvo, donde el relato ardió de verdad, fue en ella: Edna Imade (Benin City, 5 de octubre de 2000). Segunda temporada en el club. El año de la explosión. 16 goles, solo por detrás de la imparable Ewa Pajor (25). Una liga donde cada encuentro fue una amenaza. Un gol cada 149 minutos. Solo una ausencia. Pero el dato que definió su impacto no fue el más llamativo: 13 puntos generados directamente con goles suyos.

    No es ser goleadora, es ser indispensable y no pasa nada por reconocerlo, pues va a unir su talento a la de Alba Redondo o Jenni Hermoso, por citar ejemplos.

    Cuando Sonia Bermúdez ofreció la lista para la Nations League, los titulares se escribieron solos. No por las campeonas ya conocidas —Esther, Pina, Alexia— sino por la aparición sorpresiva y luminosa de un nombre que parecía inevitable, pero que nadie sabía cuándo llegaría.

    “La Roja” llegará a tierras germanas con 19 jugadoras de la Liga F Moeve, con hambre, con título que defender y con una novedad capaz de girar un partido de 0 a 180 grados en un sprint. La ida se jugará el viernes 28 de noviembre, 20:30h, Fritz-Walter-Stadion, Kaiserslautern. Televisado por La 1 y RTVE Play. El país pendiente. Las gargantas afiladas. Las pulsaciones altas.

    Mientras tanto, la lucha por la Bota de Oro se enciende: Wullaert (8), Violari (7), Pina (6), Alexia (5), pero hay quien no necesita liderar tabla alguna para dominar un partido.

    Quien necesita media ocasión para volcar destino. Una goleadora de área. Una rompelineas. Una posibilidad nueva para España.

    Ataca profundidad como pocas. Recibe de espaldas, protege con cuerpo, descarga para que el equipo respire. Presiona alto, asfixia salidas, muerde recuperación. Incluso cuando no marca, su valor es táctico. Retiene defensas. Abre pasillos a Paralluelo. Arrastra marcas para Alexia. Libera a Aitana y Pina desde segunda línea.

    España, cuna de toque, de pausa, de sincronía posicional, por fin tiene una 9 que añade ruptura, impacto, filo vertical.

    Es la pieza que faltaba.
    Es el arma que no existía.
    Es la jugadora para partidos grandes.

    Una ola gigante. Un instante fatal. Su hermano cayó al mar.
    Un hombre —un héroe anónimo, irrepetible, inolvidado— saltó sin pensarlo y lo rescató. Ese salto salvó dos vidas. Ese salto, aunque entonces nadie lo sabía, salvó también una carrera de fútbol que hoy es patrimonio español.

    Algeciras fue tierra prometida. Fue escuela. Fue primer balón.
    Edna jugaba en el recreo con chicos, sin complejos, sin tregua.
    Un profesor la vio y supo que ahí había algo.
    Su madre quiso probar flamenco; Edna fue un día. Uno solo.
    Su casa era otra, su hogar era el balón.

    Desde ahí, categorías formativas, partidos en tierra, golpes, aprendizajes, goles. Y un día, la lista. La pantalla.

    Su nombre. Y un llanto que valía todos los kilómetros de arena, todos los mares, todas las madrugadas aferradas a un su sueño.

    España jugará la ida de la final en Kaiserslautern. La vuelta será en el Metropolitano el 2 de diciembre, 18:30h. Dos estadios. Dos noches. Un título en juego.

    Frente a Ann-Katrin Berger, gigante alemana, heroína de Suiza 2025. Frente a un combinado germano que solo España fue capaz de frenar en la Eurocopa pasada (0-1). Frente a una final que define legado.

    Y España tiene a Imade. La niña que cruzó el desierto ahora cruza áreas rivales.
    La que esquivó la muerte en el agua ahora ahoga defensas.
    La que jugaba en el recreo ahora juega para un país entero.

    Porque cuando aparece la duda, aparece ella.
    Porque donde no había camino, ella lo corre.
    Porque el balón vuelve —siempre vuelve.
    Y Edna también vuelve —siempre vuelve.

    Cerramos donde empezamos: Se llama Edna, se apellida Imade.
    Y Alemania teme con razón.
    Lo mejor todavía no ha pasado. España lo sabe. Mira la final con otro brillo en los ojos.

    La futbolista, que también nacionalidad nigeriana y Marroquí, entrará por primera vez en una citación de absoluta en el que será el cuarto enfrentamiento en suelo teutón tras los que tuvieron lugar en Lübeck (1997), Mannheim (2012) y Erfurt (2018).


    “La Roja” ya tiene historia. Pero hoy, por primera vez en mucho tiempo,
    tiene también un milagro en punta de lanza.

    (Fuente: RFEF)
  • Oficial | El Tenerife es el mejor visitante de toda la Liga F

    (Fuente: Liga F Moeve)

    🟦 A las guerreras se les da mejor jugar lejos de casa que hacerlo en el Heliodoro Rodríguez López.

    El representativo canario , quinto clasificado, puede presumir de ser el mejor visitante de Liga F Moeve con 16 puntos tras lograr cinco victorias, todas ellas consecutivas, y un empate lejos de su estadio. Además, las de Eder Maestre solo han perdido un encuentro esta temporada y se encuentran a tres puntos de Europa.

    La undécima temporada en la máxima categoría del fútbol femenino español está siendo histórica para el Costa Adeje Tenerife, que continúa siendo un ejemplo de buena gestión deportiva e institucional. El club sigue creciendo año tras año, y precisamente, este pasado verano se vivió la fusión con el CD Tenerife. Una unión histórica que permitió que las jugadoras del cuadro canario porten el escudo del equipo masculino en sus camisetas, y jueguen todos los encuentros como locales en el Heliodoro Rodríguez López. Tras estas doce primeras jornadas disputadas de Liga F Moeve, las de Eder Maestre se encuentran en la 5ª posición con 23 puntos, a tan solo tres de los puestos europeos, y realizando una temporada histórica con varios puntos claves .

    Cinco victorias y un empate. Esos son los números del Costa Adeje Tenerife esta temporada lejos de su estadio. El conjunto tinerfeño logró un punto en Lezama en la primera jornada liguera ante el Athletic Club (0-0), y después ha vencido al Sevilla FC (0-4), al Alhama CF ElPozo (0-4), a la Real Sociedad (1-2), al Levante UD (2-4) y al Madrid CFF (0-2). Cinco triunfos de manera consecutiva que le han permitido convertirse en el mejor visitante de la categoría con 16 puntos, y en el único club invicto este curso fuera de casa junto con la Real Sociedad. Además, las de Eder Maestre han marcado 16 goles como visitantes, y tan solo han encajado 3 tantos, con cuatro porterías a cero La siguiente visita será el Johan Cruyff para mantener la racha.

    Tras la fusión con el CD Tenerife, el equipo tinerfeño ha pasado a disputar todos sus duelos que juega como local en el Heliodoro Rodríguez López. Hasta la fecha, el club canario ha tenido seis encuentros esta temporada en casa con una media de asistencia de 2.695 espectadores. Ante el RCD Espanyol, en el estreno este curso en el nuevo estadio, acudieron 2.014 aficionados. El récord fue contra el Real Madrid CF, al que fueron 6.423 espectadores. Ante la SD Eibar, donde se perdió el invicto esta temporada, el FC Badalona Women y el Granada CF también se mantuvieron buenas cifras de asistencia con 1.807, 1.403 y 1.711 aficionados respectivamente. La primera victoria en casa llegó frente al Atlético de Madrid, con 2.813 espectadores.

    La gran virtud de la temporada del Costa Adeje Tenerife está siendo su magnífica solidez defensiva. El club canario tan solo ha encajado 9 goles este curso, siendo el segundo equipo con menos tantos recibidos esta temporada, por detrás del FC Barcelona (2). Además, el cuadro tinerfeño fue el equipo que más estuvo sin encajar gol, hasta la sexta jornada. Un total de 485 minutos sin que ninguna jugadora rival lograra perforar la portería defendida por Noelia Ramos y Nay Cáceres, que se han turnado bajo palos. Entre ambas guardametas han dejado la portería a 0 en seis ocasiones. La de San Cristóbal de La Laguna ha echado el cerrojo en cuatro ocasiones, mientras que la arquera venezolana ha sumado dos porterías a 0.

    El conjunto canario es uno de los tres equipos más difíciles de ganar esta temporada en Liga F Moeve, junto con el F.C. Barcelona y la Real Sociedad, que, al igual que las tinerfeñas, tan solo han perdido un único encuentro este curso. La única derrota del equipo insular este año en Liga F Moeve llegó en el Heliodoro Rodríguez López, donde la SD Eibar se terminó llevando el triunfo (0-1) con un tanto de Carmen Álvarez a falta de tres minutos para el final. Desde ese partido perdido, las de Eder Maestre acumulan cinco choques de manera consecutiva sin perder, siendo el cuarto equipo más en forma del campeonato. Un conjunto muy bien trabajado, y que un año más continúa haciendo historia en la máxima categoría.

  • Oficial | La Liga F refuerza su apuesta por la formación y concede 33 becas a futbolistas como parte del Convenio Colectivo

    (Fuente: DAZN)

    🚨 La Liga F ha concedido 33 becas de formación a futbolistas profesionales de distintos clubes de la competición, en el marco del II Convenio Colectivo suscrito con los sindicatos FUTPRO, Futbolistas ON y CCOO. Estas ayudas se enmarcan en el artículo 41, Derecho al estudio y formación cultural de las Futbolistas, que recoge el compromiso de fomentar y facilitar su formación académica, siempre que sea compatible con la actividad deportiva,

    El nuevo texto del Convenio impulsa un modelo profesional centrado en la persona, con beneficios tangibles para las futbolistas. Reafirma el compromiso de promover su desarrollo académico y laboral más allá de la carrera deportiva, creando oportunidades en todas las etapas de su vida y dotándolas de herramientas reales para construir su futuro. El compromiso e implicación de los clubes ha sido clave para garantizar estos avances y facilitar que las futbolistas puedan compatibilizar su carrera deportiva con su formación académica.

    En la temporada 2025/2026 se han concedido 33 becas de estudio, gracias al fondo de formación de 70.000€ establecido en este II Convenio. Su finalidad es facilitar a las jugadoras el acceso a estudios académicos, permitirles completar su formación o adquirir una capacitación profesional, garantizando la asistencia a clase y otorgando los permisos necesarios para exámenes o pruebas según el tipo de estudios que curse cada futbolista.

    Las becas se reparten en 26 grados universitarios, 2 másteres, 4 cursos de especialización y 1 preparación de oposiciones, entre futbolistas de siete clubes: Atlético de Madrid, Athletic Club, Real Sociedad, RCD Espanyol, SD Eibar, Deportivo Abanca y Granada CF. En conjunto, las premiadas cursan disciplinas tan diversas como Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, Medicina, Nutrición, Educación, Criminología, Psicología, Enfermería, Publicidad, Administración y Dirección de Empresas, Bioinformática, Geografía e Historia, Filosofía y Economía, entre otras. Esta variedad refleja el creciente interés de las jugadoras por ampliar su formación y preparar su futuro profesional.

    La concesión de estas becas contribuye a mejorar las condiciones laborales, sociales y formativas de las futbolistas. Con esta iniciativa, Liga F reafirma su compromiso con un modelo de competición sostenible, que apuesta por la excelencia deportiva y, al mismo tiempo, por el desarrollo académico y personal de las jugadoras.

  • Reportaje | Edna Imade ; su familia como motor vital

    (Fuente: RFEF)

    🟦 Su historia personal la impulsa cada día mientras ve su sueño hacerse realidad.

    Ríos de tinta se han desbordado para intentar contar el fenómeno. Palabras incontables se han lanzado en titulares, columnas y crónicas buscando descifrar el misterio de Edna Imade. Desde su irrupción con la fuerza de un trueno en la Selección Española, la emoción se ha propagado como un incendio bello. Periódicos, radios, perfiles oficiales, plumas veteranas y jóvenes aprendices del periodismo deportivo han quedado atrapados en su historia. Incluso la Real Federación Española de Fútbol ha abrazado su llegada al combinado nacional en un vídeo que no es sólo una presentación, es un manifiesto. Porque la aparición de Edna no es solo una convocatoria: es un suceso cultural, una reparación poética, una revisión de lo que significa llegar desde tan lejos hasta tan alto.

    (Fuente: RFEF)

    Pero ninguna de esas publicaciones ha logrado contener entero el viaje. Ninguna palabra —ni todas juntas— bastan para narrar la magnitud de esa travesía. Para comprender lo que significa este “gol a la vida”, hay que desplazarse atrás, muchísimo atrás, hasta el polvo del Sahara, donde nacen historias que nadie pretende recordar y que luego, con milagro y fútbol, pasan a ser eternas.

    “El camino ha sido muy difícil, ha sido largo, pero algo siempre digo: cuando algo te cuesta mucho, lo disfrutas más”, relata Edna con la voz estremecida. Ella lo celebra hoy vestida de rojo, recibiendo una convocatoria que hizo llorar a todo el vestuario, pero el trayecto que la llevó hasta esa sala de prensa, hasta ese Himno Nacional que ahora también le pertenece, empezó en un lugar díficil de imaginar desde el asiento mullido de un estadio moderno: comenzó con una mujer valiente y dos bebés recién nacidos cruzando un desierto.

    Su madre, la protagonista silenciosa de toda esta historia, tomó una decisión que sólo puede surgir del amor más feroz: abandonarlo todo para dar a sus hijos una vida que no conocían, que no existía aún, pero que creía posible. Cruzar el Sahara con dos criaturas. Desafiar al sol, al hambre, al miedo. Dormir con la incertidumbre como manta. Llegar a Marruecos con el sueño todavía vivo pero el cuerpo desgarrado tras dar a luz. Tres o cuatro meses de pausa por necesidad vital. Y después, la infamia más arriesgada, esa palabra que hace temblar mares enteros: patera.

    La noche era un límite. El agua, un dios cruel. La costa española parecía ficción. Y de repente una ola, enorme, violenta, capaz de tragarse para siempre todo un futuro, golpeó la embarcación. Su hermano cayó al océano. Un segundo que pudo haber sido final. Un hombre —uno cualquiera, uno que hoy tal vez ignore que fue protagonista de un milagro— saltó sin pensarlo y lo rescató. Lo devolvió a la vida. Y con ese gesto anónimo, también salvó el futuro del fútbol español sin saberlo.

    Llegaron a Algeciras. Hubo manos que acogieron. Hermanas que ofrecieron techo, leche, nombre humano. Allí comenzó su vida en España, pequeña pero firme, como semilla que no sabe que un día será bosque. Allí se formó el idioma, la escuela, la calle, los pasos desordenados de la infancia.

    A veces los destinos comienzan en el recreo. Así empezó el suyo. Mientras otras niñas saltaban cuerda o bailaban palmas, Edna perseguía un balón que parecía imán. Un profesor de educación física la vio jugar entre chicos, con convicción y potencia. Lo que él observó aquel día fue un don crudo, sin moldear, pero evidente como un relámpago. Llamó a su madre y le recomendó apuntarla a un equipo local. Ella primero quiso inscribirla en flamenco —quizá imaginando belleza, tradición, escenario. Edna probó una clase. Una sola. Duró lo que dura un rechace mal despejado. Su casa estaba en el fútbol.

    Su madre lo entendió. Y apoyó. Ese gesto —aparentemente simple— fue el primer pase de gol de esta historia.

    A veces los destinos comienzan en el recreo. Así empezó el suyo. Mientras otras niñas saltaban cuerda o bailaban palmas, Edna perseguía un balón que parecía imán. Un profesor de educación física la vio jugar entre chicos, con convicción y potencia. Lo que él observó aquel día fue un don crudo, sin moldear, pero evidente como un relámpago. Llamó a su madre y le recomendó apuntarla a un equipo local. Ella primero quiso inscribirla en flamenco —quizá imaginando belleza, tradición, escenario. Edna probó una clase. Una sola. Duró lo que dura un rechace mal despejado. Su casa estaba en el fútbol.

    Su madre lo entendió. Y apoyó. Ese gesto —aparentemente simple— fue el primer pase de gol de esta historia.

    Y entonces, llegó el instante que marca el giro exacto de esta epopeya moderna.

    (Fuente: RFEF)

    La Selección Española publicaría la lista de convocadas a la mañana siguiente. Edna asumió que no estaría. Quizá porque todo lo obtenido siempre le costó. Quizá porque no creció acostumbrada a que el mundo dijera “sí”. Pero cuando llegó al entrenamiento, su entrenador Arturo le anunció la noticia: era convocable. Se proyectó un vídeo. Su nombre brilló en pantalla. Y ella lloró. Lloró con la fuerza acumulada de todos los desiertos, océanos y estadios de tierra por los que pasó.

    Lo primero que pensé fue: Edna, lo has conseguido.”Ese llanto valía más que todas las victorias juntas. Era final y principio. Era la niña que sobrevivió a una ola convirtiéndose en mujer que hoy navega el mar del fútbol mundial.

    (Fuente: RFEF)

    Vídeo de Mayca Jiménez |

    https://vm.tiktok.com/ZNRePMDhc/

    Y entonces aparece la razón última, la que sostiene todo el relato, la que teje pasado, presente y futuro:

    “Mi objetivo siempre ha sido sacar a mi familia adelante. Dios me dio el don del fútbol para eso. Y voy a ir a muerte.”

    Edna no juega sola. Juega con todos ellos. Su madre, su hermano, la ola que no los borró, el mar que quiso tragarlos y no pudo, el desierto que no secó su futuro. Cada vez que corre, lo hace como quien huye del destino que estaba escrito para ella y corre hacia otro que ha decidido escribir con goles. Cada vez que marca, confirma que la esperanza también mete el balón en la red.

    (Fuente: RFEF)


    Y aquí volvemos al principio, no en vano, los ríos de tinta sobre su llegada, el orgullo de la RFEF, el vídeo emocionado, el himno, la camiseta española que ahora lleva puesta, no son un relato reciente, son la consecuencia final de una travesía que empezó bajo un sol abrasador en África, se expandió sobre el Atlántico, se acunó en un convento de Algeciras, se entrenó en un colegio, se afianzó en la Real Sociedad y hoy se consagra en España.

    (Fuente: RFEF)

    La historia nace donde nadie mira: en el barro, en el miedo, en el milagro.
    Y culmina donde todos la ven: en el césped, en el estadio, bajo los focos.

    El círculo se cierra, sin cerrarse nunca del todo: la niña que cruzó un desierto ahora cruza áreas rivales.
    La niña que sobrevivió a una ola hoy ahoga defensas contrarias.
    La niña que jugaba en el recreo es ahora la mujer que juega para un país entero.

    Y entonces la historia empieza otra vez.
    Porque el balón siempre vuelve.
    Porque Edna también.
    Porque lo mejor —indiscutiblemente— todavía no ha pasado.

    Vídeo |

    https://youtu.be/ocVJT3MS3vQ