Categoría: Supercopa de España Femenina Iberdrola |

  • Oficial | Castellón será sede de la Supercopa de España Iberdrola 2026

    (Fuente: Liga F Moeve)

    🟣 La RFEF designa Castellón de la Plana como sede del torneo, que sale de Madrid después de varios años.

    El fútbol femenino español vuelve a escribir una página con vocación de trascendencia. No solo por lo que ocurre sobre el césped, sino por todo lo que rodea al balón cuando este empieza a rodar.

    La Real Federación Española de Fútbol (RFEF), presidida por Rafael Louzán, ha confirmado de manera oficial que Castellón de la Plana será la sede de la Supercopa de España Femenina Iberdrola 2026, una decisión que marca un punto de inflexión simbólico, territorial y estratégico en el desarrollo de una de las competiciones con mayor solera y proyección del calendario nacional.

    El anuncio no es un simple cambio de escenario. Es una declaración de intenciones. Es la constatación de que el fútbol femenino español, ya maduro, consolidado y con una identidad propia, empieza a tomar decisiones que trascienden lo económico para abrazar valores, territorio y coherencia institucional.

    Encima de la mesa estuvo la posibilidad de replicar el modelo del fútbol masculino y exportar la Supercopa a Arabia Saudí.

    Una idea que, aunque económicamente tentadora, chocó frontalmente con la realidad del fútbol femenino y con la conciencia de varios de los clubes implicados. La respuesta fue rápida y contundente. El Real Madrid C.F., entre otros, se negó a viajar a un país donde no se respetan los derechos de las mujeres, cerrando la puerta a un escenario que habría supuesto una contradicción estructural con la esencia misma de la competición.

    No fue una negativa aislada ni caprichosa. Fue una postura lógica, ética y profundamente política en el mejor sentido del término: el de defender que el crecimiento del fútbol femenino no puede desligarse de los derechos, la visibilidad y la dignidad de las mujeres. La Supercopa no es solo un torneo. Es un escaparate. Y los escaparates también comunican.

    En los últimos años, la Comunidad de Madrid se había convertido en el hogar casi permanente de la Supercopa Femenina. Entre 2021 y 2025, seis ediciones se disputaron en territorio madrileño, con sedes como Las Rozas o Leganés y, más recientemente, el Estadio de Butarque como epicentro de las dos últimas finales.

    Una apuesta continuista que, si bien ofrecía garantías logísticas y visibilidad mediática, comenzó a generar fricción entre las aficiones de clubes históricos como el FC Barcelona, la Real Sociedad o el Athletic Club. El argumento era claro y compartido: la Supercopa debía disputarse en una sede neutral, que representara a todos por igual y que reforzara la idea de un torneo de ámbito nacional, no centralizado.

    El fútbol femenino español, cada vez más seguido, más exigente y más consciente de su peso social, reclamaba aire nuevo y la RFEF, en esta ocasión, escuchó.

    Para entender la magnitud del paso que ahora se da, conviene mirar atrás. La Supercopa de España Femenina vivió un antes y un después en 2019, cuando se implantó el formato Final Four. Una decisión estratégica que transformó una competición residual en un gran evento concentrado, capaz de reunir en una única sede a los cuatro mejores equipos de la temporada y convertir cada edición en una auténtica celebración del fútbol femenino de élite.

    Aquella primera edición del nuevo formato se celebró en Mérida, en el Estadio Romano José Fouto. No fue casualidad. Fue una apuesta valiente que llevó el foco mediático a Extremadura y demostró que el fútbol femenino podía ser motor de desarrollo territorial. Un año después, en 2020, Salamanca tomó el relevo con el Estadio Helmántico como escenario, consolidando la idea de una Supercopa itinerante, cercana y con capacidad de generar identidad en distintos puntos del país.

    Desde entonces, sin embargo, el torneo fue perdiendo esa vocación viajera. Mérida y Salamanca quedaron como referencias casi nostálgicas de lo que pudo ser, hasta ahora.

    Tras cerrar el acuerdo de colaboración entre la RFEF, la Generalitat Valenciana, el Ayuntamiento de Castellón de la Plana y el CD Castellón, el fútbol femenino español ha encontrado un nuevo hogar para una de sus citas más emblemáticas. El Estadio SkyFi Castalia será la sede de la Supercopa de España Femenina Iberdrola 2026.

    Castalia no es un estadio cualquiera. Es el corazón albinegro. La casa de los ‘Orelluts’. Un recinto con capacidad para más de 15.000 espectadores, moderno, funcional y profundamente conectado con la ciudad.

    Un estadio que respira fútbol y que ahora a se prepara para acoger uno de los torneos con más historia del a panorama femenino nacional.

    Con esta elección, Castellón toma el relevo de Butarque y se convierte, durante una semana, en el epicentro del fútbol femenino español.

    El formato Final Four volverá a ofrecer un menú de lujo. Cuatro clubes históricos, cuatro estilos, cuatro formas de entender el juego y una sola corona en disputa.
    • Martes 20 de enero, 19:00 horas
    Real Madrid CF – Club Atlético de Madrid
    • Miércoles 21 de enero, 19:00 horas
    FC Barcelona – Athletic Club
    • Sábado 24 de enero, 19:00 horas
    Final

    Tres noches de fútbol grande. Tres capítulos de una historia que mezcla rivalidad, talento, ambición y memoria. Todos los encuentros se podrán seguir en directo y en abierto a través de RTVE, garantizando una cobertura de servicio público acorde a la relevancia del evento y al crecimiento sostenido de las audiencias del fútbol femenino.

    El Estadio SkyFi Castalia no es ajeno a las grandes citas federativas. La RFEF ya ha confiado en él en anteriores ocasiones, especialmente con partidos de las selecciones nacionales. El último precedente tuvo lugar el 14 de octubre, cuando la Selección española Sub-21 se enfrentó a Finlandia en un encuentro oficial que volvió a situar a Castellón en el mapa del fútbol nacional.

    Ahora, el reto es distinto. Ahora, el balón será femenino y el mensaje, aún más potente.

    La Supercopa de España Femenina 2026 no será solo un torneo, sino un espejo e incluso un reflejo de hasta dónde ha llegado el fútbol femenino español y de hacia dónde quiere ir. Elegir Castellón es elegir descentralización.

    Designar a Castellón es sinónimo de coherencia, es elegir que los valores no se negocian y que el crecimiento debe ser sostenible, inclusivo y fiel a su razón de ser.

    Cuando el balón eche a rodar en Castalia, no solo comenzará una final four. Comenzará un nuevo capítulo. Uno en el que el fútbol femenino sigue demostrando que no necesita copiar modelos ajenos para brillar, que puede construir su propio camino y que, cuando se trata de avanzar, hacerlo juntas siempre es la mejor jugada.

    Porque en enero, en Castellón, no se jugará solo una Supercopa. Se jugará el presente y el futuro de un fútbol que ya no pide permiso para ocupar el lugar que le corresponde.

  • España vs Alemania, Final UEFA Women’s Nations League 2025

    (Fuente: RFEF)

    🟦 La ciudad de Madrid se prepara para vivir una noche histórica: la final de la UEFA Women’s Nations League 2025 enfrentará a España y Alemania en el Metropolitano, con un marcador aún en blanco y un estadio que promete convertirse en un volcán de emoción, pasión y gloria. “La Roja” vestida de rojo y azul, y sus guardametas de amarillo, buscará revalidar el título ante un gigante europeo que jamás se rinde, en un duelo que trasciende lo deportivo y marca el pulso del fútbol femenino mundial.

    La noche del martes 2 de diciembre de 2025 no será una más en la historia del fútbol femenino. Madrid, la ciudad que ha visto crecer, sufrir, caer y renacer a generaciones enteras, se detendrá a las 18:30 (hora peninsular) cuando el silbato marque el inicio de un duelo que trasciende lo deportivo. Porque en el corazón del Riyadh Air Metropolitano, coloso rojiblanco convertido en templo de finales, España y Alemania se enfrentarán con un marcador virgen —0-0 tras la ida— que flota sobre el césped como una promesa y un desafío. Sobre esa hierba, la Selección española femenina saltará al terreno de juego enfundada en su piel más reconocible: camiseta roja, pantalón azul y medias azules, mientras las guardametas lucirán el amarillo, un destello que simboliza la última línea de un equipo que no negocia la valentía.

    España buscará revalidar la Nations League y extender un ciclo glorioso que comenzó en 2023 con el Mundial. Delante estará Alemania, la nación que inventó la hegemonía en Europa, el gigante que nunca se rinde y que se presenta en Madrid dispuesta a recuperar un título que siente suyo por tradición. La ida en territorio germano fue un choque de nervios y supervivencia: Cata Coll gigante, Irene Paredes heroica, y el debut de Edna Imade, que ya escribió su primera página en un gran partido. Sin embargo, la Roja llega herida: Aitana Bonmatí, Balón de Oro y brújula del equipo, no estará por lesión. Pero España ha aprendido a vivir con la presión, la adversidad y la exigencia. Irene Paredes lo resumió: “Hay que tirar hacia delante… Pensamos en jugar, competir, demostrar lo que llevamos dentro. Y a la afición… gracias. Que aprieten.” Y apretarán. El Metropolitano será un volcán, un rugido, un país convertido en coro.

    Diez enfrentamientos históricos entre España y Alemania reflejan la intensidad de esta cita: cinco victorias alemanas, cuatro empates y una sola victoria española, aquel 0-1 legendario en la semifinal de la Eurocopa.

    Ahora, Alemania quinta en el ranking FIFA y España primera del mundo, se reencuentran en una final cargada de simbolismo. Entre las convocadas, 20 jugadoras de la Liga F Moeve estarán involucradas: 19 españolas y una alemana, Bibiane Schulze, central del Athletic Club, que fue suplente en la ida, mostrando cómo el fútbol femenino español se ha convertido en referente continental.

    Esta final no es un suceso aislado. Es el fruto de una trayectoria que transformó el fútbol femenino español: desde 2015, con la revolución de las jugadoras contra la falta de profesionalización; pasando por la competitividad de 2019; hasta el Mundial de 2023 que cambió todo y la Nations League de 2024 que inauguró un reinado.

    En 2025, el objetivo es repetir, completar la doble corona y marcar historia. Para este momento, el grupo Bombai ha adaptado su tema “Contigo llegaría hasta el final”, un grito que simboliza la unión entre afición y equipo.

    Entre las figuras que cristalizan la historia de España está Jenni Hermoso, 13 años con la absoluta, campeona de Europa, México, Mundial y Nations League, un emblema de goles, lágrimas, resiliencia y gloria. Como ella dice: “Nunca me dejé caer. Esta camiseta me ha acompañado en todo. Y ahora, poder vivir esto con mi familia en la grada… es de las cosas más bonitas que he sentido.”

    Entre España y Alemania se acumulan 55 goles en 16 partidos, una media de 3,4 por encuentro. El 0-0 de la ida es una trampa emocional: cualquiera de los dos colosos puede incendiar la final y ambos lo saben. España llega entera a pesar de la ausencia de Aitana; Alemania llega motivada pero peligrosa. Campeona del mundo contra reina de Europa. Dos estilos, dos culturas futbolísticas, dos formas de entender la grandeza.

    Los más de 250 profesionales acreditados para cubrir la final serán testigos de un espectáculo histórico. Las acreditaciones se entregarán en la Puerta 6 a partir de las 16:30 horas. La afición, el equipo y la historia se fundirán en una misma emoción: un estadio convertido en fortaleza donde España quiere escribir su segundo abrazo con la Nations League. Porque esta generación no solo compite: marca una era. Porque esta final no solo define un campeón: define un legado.

    Queda un partido. Queda un estadio empujando. Queda un marcador en blanco que pide historia. Queda la duda: ¿España levantará su segunda Nations League consecutiva o Alemania reclamará el trono que siente suyo? Queda lo mejor del fútbol: incertidumbre, épica, emoción, miedo y esperanza. Queda una final que será gigantesca, inolvidable, Europa en 90 minutos. El Metropolitano dictará sentencia. España o Alemania. La Roja o las reinas de Europa. La gloria tendrá solo un nombre. Y lo escribirá el fútbol.

    Los fans ya velan sus armas y acudirán en masa al Metropolitano para vibrar en un encuentro de leyenda que se recordará siempre, y en “El Partido de Manu” estaremos acreditados para dar fe in situ de la historia que está por venir, al más puro estilo de Elena Farga.

    (Fuente: RFEF)

    🔜 𝙉𝙀𝙓𝙏 𝙂𝘼𝙈𝙀

    🔥 España 🇪🇸 🆚 Alemania 🇩🇪🔥

    ✨ La final ✨

    📅 Martes, 2 de diciembre de 2025

    ⏰ 18:30 horario peninsular

    🩵 Matchday 2 | Dia de partido

    📺 La 1 de RTVE

    🏟️ Riyadh Air Metropolitano, Madrid

    (Fuente: RFEF)
  • Reportaje | El trofeo de la UEFA Women’s Nations League — historia, diseño y significado de un símbolo de gloria

    (Fuente: UEFA)

    🟦 Un trofeo para una nueva era del fútbol femenino.

    El trofeo de la UEFA Women’s Nations League (en español, Liga de Naciones Femenina de la UEFA) es mucho más que un objeto de metal: es un símbolo tangible de la evolución del fútbol femenino en Europa. Su aparición marca un hito, pues representa la consagración de una competición continental donde las selecciones nacionales femeninas pueden disputar —al igual que sus homólogas masculinas— un torneo con sistema de ligas, ascensos, descensos y una final a la que aspirar.

    Este trofeo fue revelado por primera vez durante el sorteo de las finales (final-four) en la sede de la UEFA en Nyon, Suiza.  Desde ese momento, la imagen del trofeo ya quedó asociada a una idea ambiciosa: elevar el estatus y la visibilidad del fútbol femenino en Europa. Tal como dijo uno de los responsables del diseño, el trofeo busca transmitir “la elevación de una nación” —el momento en que una selección logra alzarse por encima de todas tras un ciclo de esfuerzo, ascensos y combates.

    La creación de la Women’s Nations League responde a una voluntad clara de la UEFA: institucionalizar, profesionalizar y dar visibilidad a las selecciones nacionales femeninas en una estructura competitiva similar a la masculina.

    Cuando se presentó el trofeo, uno de los mensajes de la UEFA fue el de que este trofeo merecía ser “espectacular” —porque la competición lo era.  Además, reflejaba un compromiso simbólico: otorgar a las mujeres el mismo tipo de reconocimiento y prestigio que sus colegas masculinos desde una perspectiva de igualdad deportiva.

    Cuando se presentó el trofeo, uno de los mensajes de la UEFA fue el de que este trofeo merecía ser “espectacular” —porque la competición lo era.  Además, reflejaba un compromiso simbólico: otorgar a las mujeres el mismo tipo de reconocimiento y prestigio que sus colegas masculinos desde una perspectiva de igualdad deportiva.

    En definitiva, el trofeo de la UEFA Women’s Nations League no es simplemente un objeto de plata o un premio más. Es una metáfora del ascenso colectivo, de la visibilidad recién conquistada, de la profesionalización de selecciones que quieren ganar todo —y en igualdad de condiciones. Es un puente entre generaciones, una promesa de futuro y un reconocimiento del pasado.

    Que una selección levante ese trofeo supone no solo proclamar su superioridad deportiva, sino también afirmar que el fútbol femenino importa, que tiene historia, peso, raíces y alas para volar en Europa. Y cada edición que pase —cada jornada, cada gol, cada final— engrandecerá ese trofeo, que no deja de ser, en el fondo, un faro de esperanza y orgullo para millones de mujeres que sueñan con pisar un campo y alzarlo al cielo.

    No existe trofeo más simbólico para este tiempo.
    No existe copa más cargada de ambición para un continente que ha decidido, por fin, mirar al fútbol femenino con la grandeza y el respeto que merece.
    No existe objeto más adecuado para coronar una final entre España y Alemania, en un templo majestuoso, en una ciudad que late fútbol.

    Porque este trofeo no es una recompensa.
    Es una declaración.
    Un mensaje.
    Una historia en vertical.
    El espejo del ascenso y la promesa del futuro.

    Y el día que una capitana lo eleve sobre su cabeza, la imagen quedará grabada para siempre como el momento exacto en que la Women’s Nations League se convirtió en leyenda.

    🔜 𝙉𝙀𝙓𝙏 𝙂𝘼𝙈𝙀

    🔥 España 🇪🇸 🆚 Alemania 🇩🇪🔥

    ✨ La final ✨

    📅 Martes, 2 de diciembre de 2025

    ⏰ 18:30 horario peninsular

    🩵 Matchday 2 | Dia de partido

    📺 La 1 de RTVE

    🏟️ Riyadh Air Metropolitano, Madrid

    (Fuente: UEFA)
  • Reportaje | Edna Imade, la amenaza que Alemania teme

    (Fuente: RFEF)

    🟨 La nueva delantera de “La Roja” es la principal baza ofensiva de España ante el cuadro germano.

    📰 Edna Imade, la delantera que vino del desierto para cambiar la historia de España 📰

    (Fuente: RFEF)

    La epopeya definitiva. Un reportaje de “El Partido de Manu” para leer prisa, para respirar fútbol, para recordar durante años.

    Hay futbolistas cuya sola mención genera respeto con su sola presencia en el césped.

    Hay otras que despiertan miedo. Y luego está Edna Imade, un nombre que Alemania recita con la misma cautela con la que se invoca a una tormenta. La subcampeona de Europa llega a la final de la Nations League con un as bajo el brazo. España no solo lleva botas y maletas a Kaiserslautern y Lleva pólvora, historia y Edna.

    El de Edna Imade es uno de ellos. Su nombre no solo se escucha: resuena. Vibrante. Ascendente. Decisivo. Y en Alemania —bronce olímpico en París 2024, potencia eterna, coloso de acero— el simple hecho de mentarla genera inquietud. No es exageración: es realidad competitiva, es fútbol.

    España, vigente campeona de la Nations League, se encuentra ante un nuevo desafío monumental: la final ante Alemania, la última valla entre las subcampeonas de Europa y un título que podría instalar una dinastía. Pero esta vez algo es distinto. Esta vez existe un factor que reescribe libretos, que rompe análisis previos, que abre posibilidades que antes no estaban sobre la mesa.

    Esa diferencia tiene zancada, tiene acento, tiene historia y tiene destino.

    Se llama Edna, se apellida Imade y viene para quedarse y golear, tomen nota.

    Para entender por qué España sueña con ella, primero hay que entender lo que hizo en Granada. No fueron números decorativos, fueron números tallados en mármol.

    Pero donde la mirada se detuvo, donde el relato ardió de verdad, fue en ella: Edna Imade (Benin City, 5 de octubre de 2000). Segunda temporada en el club. El año de la explosión. 16 goles, solo por detrás de la imparable Ewa Pajor (25). Una liga donde cada encuentro fue una amenaza. Un gol cada 149 minutos. Solo una ausencia. Pero el dato que definió su impacto no fue el más llamativo: 13 puntos generados directamente con goles suyos.

    No es ser goleadora, es ser indispensable y no pasa nada por reconocerlo, pues va a unir su talento a la de Alba Redondo o Jenni Hermoso, por citar ejemplos.

    Cuando Sonia Bermúdez ofreció la lista para la Nations League, los titulares se escribieron solos. No por las campeonas ya conocidas —Esther, Pina, Alexia— sino por la aparición sorpresiva y luminosa de un nombre que parecía inevitable, pero que nadie sabía cuándo llegaría.

    “La Roja” llegará a tierras germanas con 19 jugadoras de la Liga F Moeve, con hambre, con título que defender y con una novedad capaz de girar un partido de 0 a 180 grados en un sprint. La ida se jugará el viernes 28 de noviembre, 20:30h, Fritz-Walter-Stadion, Kaiserslautern. Televisado por La 1 y RTVE Play. El país pendiente. Las gargantas afiladas. Las pulsaciones altas.

    Mientras tanto, la lucha por la Bota de Oro se enciende: Wullaert (8), Violari (7), Pina (6), Alexia (5), pero hay quien no necesita liderar tabla alguna para dominar un partido.

    Quien necesita media ocasión para volcar destino. Una goleadora de área. Una rompelineas. Una posibilidad nueva para España.

    Ataca profundidad como pocas. Recibe de espaldas, protege con cuerpo, descarga para que el equipo respire. Presiona alto, asfixia salidas, muerde recuperación. Incluso cuando no marca, su valor es táctico. Retiene defensas. Abre pasillos a Paralluelo. Arrastra marcas para Alexia. Libera a Aitana y Pina desde segunda línea.

    España, cuna de toque, de pausa, de sincronía posicional, por fin tiene una 9 que añade ruptura, impacto, filo vertical.

    Es la pieza que faltaba.
    Es el arma que no existía.
    Es la jugadora para partidos grandes.

    Una ola gigante. Un instante fatal. Su hermano cayó al mar.
    Un hombre —un héroe anónimo, irrepetible, inolvidado— saltó sin pensarlo y lo rescató. Ese salto salvó dos vidas. Ese salto, aunque entonces nadie lo sabía, salvó también una carrera de fútbol que hoy es patrimonio español.

    Algeciras fue tierra prometida. Fue escuela. Fue primer balón.
    Edna jugaba en el recreo con chicos, sin complejos, sin tregua.
    Un profesor la vio y supo que ahí había algo.
    Su madre quiso probar flamenco; Edna fue un día. Uno solo.
    Su casa era otra, su hogar era el balón.

    Desde ahí, categorías formativas, partidos en tierra, golpes, aprendizajes, goles. Y un día, la lista. La pantalla.

    Su nombre. Y un llanto que valía todos los kilómetros de arena, todos los mares, todas las madrugadas aferradas a un su sueño.

    España jugará la ida de la final en Kaiserslautern. La vuelta será en el Metropolitano el 2 de diciembre, 18:30h. Dos estadios. Dos noches. Un título en juego.

    Frente a Ann-Katrin Berger, gigante alemana, heroína de Suiza 2025. Frente a un combinado germano que solo España fue capaz de frenar en la Eurocopa pasada (0-1). Frente a una final que define legado.

    Y España tiene a Imade. La niña que cruzó el desierto ahora cruza áreas rivales.
    La que esquivó la muerte en el agua ahora ahoga defensas.
    La que jugaba en el recreo ahora juega para un país entero.

    Porque cuando aparece la duda, aparece ella.
    Porque donde no había camino, ella lo corre.
    Porque el balón vuelve —siempre vuelve.
    Y Edna también vuelve —siempre vuelve.

    Cerramos donde empezamos: Se llama Edna, se apellida Imade.
    Y Alemania teme con razón.
    Lo mejor todavía no ha pasado. España lo sabe. Mira la final con otro brillo en los ojos.

    La futbolista, que también nacionalidad nigeriana y Marroquí, entrará por primera vez en una citación de absoluta en el que será el cuarto enfrentamiento en suelo teutón tras los que tuvieron lugar en Lübeck (1997), Mannheim (2012) y Erfurt (2018).


    “La Roja” ya tiene historia. Pero hoy, por primera vez en mucho tiempo,
    tiene también un milagro en punta de lanza.

    (Fuente: RFEF)
  • Oficial | España vuelve a levantar un título mundial: #SeAcabó: Diario de las Campeonas conquista el Emmy Internacional y firma una gesta histórica para el deporte, la cultura y la memoria colectiva

    (Fuente: Netflix)

    📰 España vuelve a levantar un título mundial: #SeAcabó: Diario de las Campeonas conquista el Emmy Internacional y firma una gesta histórica para el deporte, la cultura y la memoria colectiva 📰

    En una noche marcada por la emoción, el reconocimiento y la justicia histórica, la producción española #SeAcabó: Diario de las campeonas se alzó con el Premio Emmy Internacional al Mejor Documental Deportivo de 2025, consagrando una obra que no solo relata la trayectoria de la Selección Española femenina hacia la gloria mundial en 2023, sino que ha logrado convertirse en un símbolo cultural y social que trasciende el deporte.

    Ante una audiencia internacional y en la meca global del audiovisual, el proyecto dirigido por Joanna Pardos y producido por You First Originals para Netflix superó a tres gigantes:
    • Argentina 78, retrato del primer título mundial argentino en casa,
    • Chasing the Sun 2, la aclamada pieza que narra la epopeya rugbística de Sudáfrica,
    • y Sven, el conmovedor recorrido de un entrenador sueco que luchó contra el cáncer.

    Y aun así, fue la historia de un grupo de futbolistas españolas —de su talento, de su lucha interna y externa, de su unión y de su valentía— la que conquistó al jurado internacional.

    recibir el galardón, la directora Joanna Pardos expresó con emoción contenida lo que este triunfo significa:

    “Es algo en lo que sueñas si te gusta el cine, y más con una historia así. Que una plataforma como Netflix apostara por contarla con libertad total demuestra que están cambiando las normas. Y que una niña vea esto y piense que también puede romper barreras… ese es el verdadero premio.”

    Sus palabras encarnan el espíritu del movimiento #SeAcabó, que no nació en un plató ni en un guion, sino en el vestuario, en los campos de entrenamiento, en las calles y en los corazones de miles de aficionados que vieron en la Selección un espejo de dignidad y coraje.

    SeAcabó: Diario de las campeonas es el cuarto gran proyecto documental de You First Originals, tras Ona Carbonell. Empezar de nuevo (Rakuten TV),
    11 Tiros (HBO Max)
    y Alexia: Labor Omnia Vincit (Prime Video).

    Sin embargo, este era diferente. Este tocaba una fibra íntima, profunda, delicada que te atraviesa la piel en cada escena.

    Como explicó Luis Miguel Calvo, director de contenidos de You First:

    “Fue un proyecto muy complicado, con muchas versiones. No toda la sociedad sentía lo mismo, pero queríamos equilibrar una historia que había sido contada de forma muy desbalanceada. Este documental reivindica la historia real: la de las campeonas.”

    El Emmy no solo premia excelencia audiovisual, sino también valentía.
    La valentía de narrar, de escuchar, de acompañar, de sostener.

    reconocimiento llega en una semana simbólica: la final de la Nations League entre España y Alemania, un duelo que volverá a reunir sobre el césped a cinco de las once protagonistas del documental:
    • Jenni Hermoso
    • Alexia Putellas
    • Irene Paredes
    • Aitana Bonmatí
    • Olga Carmona

    Cinco símbolos, cinco líderes, cinco mujeres que continúan escribiendo capítulos inolvidables para el fútbol español.
    Que su historia sea premiada en Nueva York mientras ellas se preparan para otra final internacional convierte esta coincidencia en una postal irrepetible: la memoria y el presente caminando juntas hacia el futuro.

    La magnitud del triunfo no reside únicamente en el Emmy, sino en lo que representa.

    Es un testimonio de un antes y un después, de un país que aprendió a mirar a sus jugadoras con el respeto que merecen, de un movimiento que trascendió fronteras y que se convirtió en una bandera universal.

    Porque esta victoria, aunque se haya producido en un teatro neoyorquino y no en un estadio, tiene el mismo sabor de las grandes noches deportivas. #SeAcabó: Diario de las campeonas no es solo un documental; es un manifiesto. Es un testimonio para las generaciones futuras, una herramienta pedagógica, una pieza de memoria histórica reciente. Es el reflejo de cómo un grupo de mujeres cambió la percepción social del deporte femenino, conquistó títulos, desafió inercias, rompió silencios y despertó conciencias. Es, en definitiva, la historia real de las campeonas de un país que aprendió a mirarlas a los ojos y reconocerlas como merecían.

    El Emmy Internacional certifica que esta historia, nuestra historia, es universal. Que el talento, el coraje y la dignidad no entienden de fronteras.

    Que cuando España gana, ya sea con un balón en los pies o en la pantalla de millones de hogares, lo hace para emocionar, para inspirar y para recordar que nada ha sido gratis y que cada paso ha costado valentía.

    En Nueva York se escuchó el nombre de #SeAcabó: Diario de las campeonas. Y con él, resonaron los nombres de todas las que lucharon, resistieron y vencieron. Las que hicieron historia sobre el césped y fuera de él. Las que abrieron una puerta que nunca volverá a cerrarse. Las que convirtieron un movimiento en un legado. Las que hoy, una vez más, vuelven a levantar una copa para España.

    Y lo hacen, como siempre, con la cabeza muy alta.

  • El Real Madrid frena el traslado de la de Supercopa de España Iberdrola

    (Fuente: Liga F Moeve )

    🔹 Sorpresa e indignación de parte de la RFEF y en el fútbol femenino por la decisión del club merengue al tomar la decisión de frenar su participación en el torneo en tierras norteamericanas

    La cancelación del desplazamiento a Miami ha provocado consternación en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y en los clubes implicados. Equipos como el FC Barcelona, Atlético de Madrid y Athletic Club, que también estaban programados para participar en el torneo, se encuentran ahora en una situación de incertidumbre.

    La decisión ha generado preocupación por las posibles repercusiones que esta suspensión pueda tener en los planes de expansión del fútbol femenino, tanto a nivel nacional como internacional. Para muchos expertos, este episodio supone un tropiezo significativo en los esfuerzos de globalización de la competición.

    El estadio de Miami, que debía acoger los encuentros con la expectación de un nuevo escenario y la presencia de aficionados, queda ahora en silencio, como símbolo de una oportunidad perdida. Casos similares pueden observarse recientemente en el intento de llevar encuentros de LaLiga EA Sports, como el FC Barcelona-Villarreal de la jornada 17, a Estados Unidos, iniciativa a la que el Real Madrid ha mostrado su oposición.

    Frente a esta situación, los clubes afectados deberán explorar alternativas, que podrían incluir la reubicación o incluso el aplazamiento del torneo, siempre que se logre un acuerdo entre todas las partes. Todo dependerá de si se pueden garantizar los estándares señalados como imprescindibles por el Real Madrid.

    Este episodio abre un debate más amplio sobre la preparación institucional, la inversión real y las expectativas de crecimiento del fútbol femenino en España. La pregunta que surge ahora es hasta qué punto los clubes y federaciones están preparados para responder a la creciente demanda de internacionalización de la competición.

    El Real Madrid tiene claro que no va a llevar al equipo de Pau Quesada a jugar esta competición fuera de España porque, según Onda Cero, «no la ve una competición madura». Ahora, habrá que ver qué pasa con la disputa de la Supercopa de España femenina porque la decisión del Real Madrid ha roto todos los planes de la Real Federación Española de Fútbol que encabeza Rafael Louzán.

    Así, una competición de tanto prestigio que el año pasado nos dejó una gran final entre el Barcelona y el Real Madrid seguirá celebrándose en territorio nacional y no se deja seducir por los “vicios” del balompié masculino, en lo que es una gran noticia para los fans.