
¡Más allá de 2025! La centrocampista española permanecerá el Johan Cruyff, pese al interés del Chelsea, si se lo mejora el salario.
Aitana Bonmatí Conca (Sant Pere de Ribes, Barcelona, España, 18 de enero de 1998)[1][2] es una futbolista española. Juega en la demarcación de centrocampista ofensiva en el Fútbol Club Barcelona de la Liga F. Comenzó su carrera en el fútbol base del F. C. Barcelona, pasando por sus divisiones menores hasta debutar con el primer equipo en 2016.
Con las azulgranas ha conseguido en el plano nacional cuatro Copas de la Reina, cuatro Ligas y tres Supercopa. Junto con dos Ligas de Campeones de la UEFA en 2021 y 2023, consiguiendo en la temporada 22/23 un triplete. En 2023 fue galardonada con el Balón de Oro a la mejor jugadora del mundo. Ese mismo año, fue incluida entre las cien mujeres más influyentes del mundo por la BBC.
Ha sido internacional con las categorías inferiores de la selección española, llegando a ser capitana. Consiguió ser campeona en el Europeo sub-17 y Europeo Sub-19, junto con ser subcampeona del Mundial Sub-20 en 2018. Desde el 2017 es internacional absoluta con la selección de España, con quienes debutó en la Copa Mundial de 2019, y resultando campeonas de la Copa Mundial de 2023.

Podría decirse que a nadie sorprende la capacidad que Aitana posee para multiplicarse en el terreno de juego, pero lo cierto es que sí ocurre: maravilla con su juego y gana, gana y gana. Nació en el primer mes de 1998 y a sus 26 años observa ya en su vitrina personal un Balón de Oro y el premio a Mejor Jugadora del Año de la UEFA. En lo colectivo, y a parte del extenso palmarés en su trayectoria de clubes —es one club woman—, el éxito de la selección durante la pasada época estival le hizo besar el cielo de Sídney y regresar a España con el trofeo del Mundial en el avión.
Su perfil profesional es ampliamente conocido; no así el personal, caracterizado por una distancia prudencial que guarda entre su vida privada y el candente foco de lo mediático. Oriunda de Sant Pere de Ribes, Barcelona, Aitana fue creciendo en equipos mixtos hasta que dio el salto a La Masía; paralelamente, alimentaba su conocimiento deportivo con una formación académica orientada al mundo que tanto ama.
Después de cursar el Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte se embarcó en un Máster en Gestión Deportiva en el Johan Cruyff Institute. Lo intelectual no resulta ajeno a Aitana, que vivió en casa la importancia de las letras en cualquiera de sus formas: sus padres, Rosa y Vicent, son filólogos de formación y ejercen como profesores de Lengua y Literatura Catalana.
La cultura se enseña desde la costumbre; una idea similar dejaba entrever la futbolista en una ocasión: “Siempre he estado muy vinculada a los estudios, sobre todo a las lenguas. Ellos, desde bien pequeña, me han inculcado el tema de la lectura. De hecho, la casa de mis padres no sé si es una casa o una biblioteca, y el hecho de leer y seguir aprendiendo me viene de su parte”.
No esconde sus orígenes. “Tengo muy buenos recuerdos de mi infancia en Sant Pere de Ribes. Es el pueblo donde crecí, donde me he hecho futbolista. Aquí fueron mis inicios en el patio de la escuela, después en mi club, en el Club Deportiu Ribes… Nunca me he mudado de aquí”, dijo aquella vez, haciendo hincapié en la necesidad, propia de aquellos que reconocen cuál es su hogar, de volver a Ribes cuando la ciudad condal le da tregua.
Después de ‘Aitana’ la historia se escribe con ‘Bonmatí’, que es el apellido de su madre y no de su padre. Sus progenitores decidieron en su día ponerle primero el apellido materno, pero las leyes y los tiempos, entendiendo que lo primero depende casi siempre de lo segundo, no les dejaron; debieron registrarla con los dos apellidos de Rosa y, pasado el tiempo, en 2019, cuando la legislación cambió, hicieron el cambio oportuno para que figurase como segundo el de su Vicent.
Esta lucha llegó incluso a la televisión. Allá por 1999 apareció su madre en Bon dia Catalunya para reivindicar su caso y contar su historia. Entonces ella no lo sabía, pero fue el tiempo quien terminó escribirla.

La admiración hacia Aitana Bonmatí, jugadora del Fútbol Club Barcelona, no tienen límites. Este martes la UEFA ha proclamado la azulgrana como mejor jugadora de la Champions League femenina de esta temporada, consiguiendo este reconocimiento por segunda vez y consecutivamente. Bonmatí abrió la lata en la final contra el Olympique de Lyon para ganar la tercera Champions de la historia del club culé, uno de los muchos detalles que el panel de observadores técnicos del órgano europeo ha reconocido: «Influyó al juego en todo el campo, con la posesión y sin. Muchos pases progresivos, muchas recuperaciones de pelota y marcó un gran gol.
Aitana Bonmatí ha cerrado la Champions League con seis goles y seis asistencias, un hecho que lo ha llevado a ser reconocida como la mejor jugadora de la competición por ante una compañera de equipo, Caroline Graham Hansen, que ha marcado cinco goles y repartido cinco asistencias. La azulgrana ha sido una pieza clave en la mejor temporada de la historia del Barça femenino porque ha jugado 3.672 minutos entre todas las competiciones con un total de 50 partidos, veintitrés goles y veinte asistencias para ganar todos los títulos posibles. Además del reconocimiento por parte de la UEFA, este año Bonmatí también ha conseguido el Premio Laureus a mejor deportista femenina del año, un éxito más tras el Balón de Oro y el “The Best”.

Además de levantar la Champions, Aitana Bonmatí también forma parte del once ideal de la competición de esta temporada. La vigente ganadora del Balón de Oro está acompañada por cuatro compañeras de equipo: Irene Paredes, Lucy Bronze, Patrio Guijarro y Graham Hansen. El Barça es el equipo con más representación al once, superando el Olympique de Lyon, que tiene cuatro jugadoras: Christiane Edler, Selma Bacha, Lindsey Horan y Kadidiatou Diani. La afición azulgrana, pero, ha echado de menos la presencia de dos jugadoras clave para el conjunto dirigido por Jonatan Giráldez: Keira Walsh e Ingrid Engen. La inglesa ha sido la futbolista con más minutos en la Copa de Europa, mientras que la noruega ha sido clave adaptándose a la posición de central para sustituir Mapi León.
La internacional española lleva tiempo siendo seguida por el Chelsea Football Club Women, elenco al que se enfrentó, con gol de por medio, en la semifinales de la Champions League Femenina.
El conjunto británico, que ha ganado la Barclays Women’s Super League 2023-2024 por quinta ocasión en su historia amén de un 0-6 ante el Manchester United en Old Trafford, está dispuesto a tirar la casa por la venta por la “6” de “La Roja”.
El caso es que la gran actuación de Aitana esta campaña, así como su condición de actual mejor jugadora del mundo, ha llamado la atención de varios clubs importantes, siendo el más interesado en ella el Chelsea. En el Barcelona lo saben y por eso tienen claro que el próximo movimiento estratégico de la entidad debe ser atar a Aitana, que tiene contrato hasta el 30 de junio de 2025 y merece una adecuación del mismo porque firmó su última renovación el 31 de diciembre de 2022. Desde entonces, su peso en el equipo y en el fútbol mundial ha crecido mucho y eso debe ser reconocido.

El Chelsea quiere pescar en río revuelto y seducir a la centrocampista catalana y esto se ha vivido en territorio barcelonés como una amenaza, toda vez, que Mariona Caldentey va a ser traspasada al Arsenal en el mercado estival y quieren evitar que se produzca más fuga de talento.
El campeón de la Liga F ya ha activado toda la maquinaria para ofrecerle una extensión de su vínculo contractual a la representada por Jorge Mendes, el agente de Cristiano Ronaldo, más allá del próximo 30 de junio de 2025, ardua tarea.
Según nos ha confirmado el periodista deportivo Germán Urrutia, que maneja muy bien el entorno culé, la “14” azulgrana estaría dispuesta a hacer oídos sordos de la propuesta londinense si la entidad que preside Joan Laporta le pone encima de la mesa una mejora sustancial de su salario que actualmente es de menos de 300.000 € anuales y tiene como objetivo percibir lo mismo que la recién renovada Alexia Putellas, 850.000 euros más los contratos publicitarios.

Bonmatí esta totalmente comprometida con el proyecto pero admiten que hay que ampliar y mejorar su contrato por su calidad y por lo que ofrecen otros equipos. En el seno de la entidad culé hay mucha preocupación porque la Liga F no acaba de dar el salto competitivo necesario para ser un campeonato disputado y eso hace que las jugadoras culés puedan perder motivación. Además, en el Barça no se entiende que teniendo al mejor equipo del mundo en la competición, a las jugadoras campeonas del mundo y a las dos últimas ganadoras del Balón de Oro no se consigan patrocinadores que puedan redundar en que los clubs tengan más ingresos para poder hacer plantillas más potentes que incentiven la competencia y, por tanto, el interés de la afición por ir a los estadios y ver los partidos por televisión, pero si todo sigue los cauces normales, nada hace pensar lo contrario, Aitana será fiel al equipo de su corazón, el Barça.

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