(Fuente: @LFC)
¡Desde los once metros! El hexacampeón de Europa se impuso al Chelsea para adjudicarse el primer título europeo de la 19/20.
El Liverpool Football Club, que el pasado 1 de junio de 2019 levantó la sexta UEFA Champions League de su historia en el Estadio Wanda Metropolitano, tuvo que recurrir a los penaltis (5-4) para tumbar a los ‘blues’. Esta situación permite a los de Anfield suceder al Atlético de Madrid en el palmarés de la UEFA Super Cup.
El encuentro, primero con carácter oficial del curso futbolístico 2019/2020 en lo que a competiciones europeas se refiere, se celebró en la ciudad turca de Estambul, que también acogerá la gran final de la Liga de Campeones.
La contienda, primera de estas características para dos equipos ingleses en esta competición, tuvo un arranque marcado por la paridad. En los compases posteriores al pitido inicial, que dio la colegiada francesa Frappart, evidenció que ambas escuadras se estudiaban mutuamente y procuraban no cometer errores que pudiesen comprometer el devenir del partido por el título.
Poco a poco, el transcurso de los minutos fue favorable para los intereses del Chelsea Football Club. El vigente campeón de la UEFA Europa League 2018/2019 corrigió los errores defensivos que le condenaron ante el Manchester United en el debut liguero y comenzó a hilvanar fútbol ofensivo con el que inquietó el arco defendido por Adrián San Miguel.
Pedro Rodríguez, que se mostró muy activo en la parcela ofensiva de los londinenses, fue el encargado de generar las primeras ocasiones de gol. El futbolista canario estrelló el esférico en el larguero en el minuto 22 de juego para inaugurar el capítulo de hostilidades en el duelo.
Sin solución de continuidad, mientras la entidad que preside Roman Abramovich comenzaba a embotellar a los de Merseyside en su propio área, una acción personal de Pullisic le sirvió el esférico a Giroud para que el galo cruzase su remate y abriese la lata al firmar el 0-1 cuando el reloj marcaba el minuto 36 de partido.
La diana del internacional francés, que también marcó en la final de la Europa League que se celebró en Bakú allá por el 29 de mayo de 2019, hacía justicia a lo que los dos clubs estaban mostrando sobre el verde durante la primera mitad.
El VAR, que se estrenaba en esta competición, impidió que el Chelsea duplicase su ventaja por medio de Pullisic al apreciarse posición irregular en el momento en el que el jugador norteamericano ejecutó el remate a los 39 minutos del enfrentamiento.
Los 22 protagonistas ganaban el túnel de vestuarios con una mínima ventaja para los pupilos de Frank Lampard, todo habría de decidirse en el segundo acto en territorio otomano.
En el entretiempo Jürgen Klopp, consciente de que los suyos adolecían de la verticalidad que les llevó a ser campeones de Europa ante el Tottenham, optó por dar entrada a Firmino en detrimento de un indolente Chamberlein.
Tras la reanudación, el Liverpool reingresó al terreno de juego con mentalidad ganadora, no tardaron los locales en equilibrar la balanza . En el minuto 47 el atacante brasileño Roberto Firmino chutó y se topó con unos reflejos soberbios de Kepa, que no pudieron evitar que el balón se introdujese en el marco visitante cuando Mané, prácticamente a puerta vacía recogió el rechace e instauró el 1-1 en el marcador electrónico.
A partir de ese momento, espoleado por la diana conseguida, el Liverpool asedió la meta de los de Londres durante el primer cuarto de hora de la segunda mitad, sin embargo, una gran actuación bajo palos de su cancerbero evitó el segundo.
En la recta final del tiempo reglamentario, todo ello precedido de unas variantes tácticas de Frank Lampard, dotaron a los visitantes de mayor frescura y los de Stamford Bridge volvieron a imponer su ley sobre el vencedor de de la última edición de la Copa de Europa. Bajo este contexto de partido, muy halagüeño para el combinado capitalino, Mason Mount, que estuvo cedido en el Derby Country el pasado año, marcó gol en el minuto 84, eso si, en fuera de juego a criterio de la asistente.
Al término de los noventa minutos el marcador no se modificó y el empate a uno provocó que la prórroga hiciese acto de presencia en Estambul.
Corría el minuto 95 de la final de la Supercopa de Europa cuando una nueva conexión entre Firmino y Mané posibilitó que los de Anfield le diesen la vuelta al tanteador. El delantero brasileño ganó la línea de fondo y sirvió un balón en bandeja a su compañero en la punta de ataque, quien tras conectar un disparo que se alojó en la escuadra, hizo el 2-1 para firmar un doblete en su cuenta particular que desataba la locura de la afición ‘red’ que se había congregado en el graderío del Besiktas Park.
Los minutos pasaban lenta pero inexorablemente sin que el combinado londinense fuese capaz de frenar el empuje de un Liverpool que acariciaba el título.
Todo parecía visto para sentencia en favor a los de Anfield, eran superiores a los ‘blues’ en casi todas las facetas del juego, cuando un derribo de Adrian San Miguel sobre el joven Tammy Abraham fue sancionado como penalti por la colegiada gala.
Jorginho, que tenía mal estampado su nombre en la elástica, asumió la responsabilidad de ejecutar y transformar la pena máxima que significó el 2-2 definitivo a los 101 minutos de la primera final continental de la temporada.
El Chelsea, que por la sanción de la FIFA está castigado sin poder realizar incorporaciones en estas dos ventanas de fichajes, estuvo a punto de tumbar a su oponente y gozó de varias ocasiones para lograrlo antes de que acabase el tiempo suplementario.
El nuevo campeón de la Supercopa de Europa habría de decidirse desde el punto fatídico.
Todos los lanzadores londinenses estuvieron acertados y no cometieron un sólo fallo, entonces, cuando la presión era máxima, la responsabilidad recayó sobre un inexperto Abraham. El que fuese delantero del Aston Villa el pasado curso cedido por los ‘blues’, se topó con una magistral intervención con el pie de Adrián San Miguel que aprovechó la lesión de Alisson Becker para otorgarle el cuarto título en esta competición a los de Klopp.
Así las cosas, el vigente campeón de Europa ha sido capaz de alzar dos títulos continentales en un lapso temporal de 74 días.
Goleadores:
0-1 Giroud 36′ ⚽️
1-1 Mané 47′ ⚽️
2-1 Mané 95′ ⚽️
2-2 Jorginho (P.) 101′ ⚽️
Penaltis:
5-4 gana Liverpool
Vídeo:
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